Elecciones en noreste sirio intentarán reproducir el Kurdistán iraquí
La autodenominada Administración Autónoma kurda celebrará elecciones en mayo próximo bajo el auspicio de EE. UU. y Occidente.
Desde su establecimiento en 2013, la autodenominada Administración Autónoma kurda trabajó para imponerse como una entidad fijada en la realidad de la guerra en Siria en la parte noreste del país.
Este proceso comenzó a fortalecerse después de la formación de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) como su brazo militar, en una iniciativa estadounidense en 2015, la cual creó una alianza encabezada por las Unidades de Protección Popular kurdas, con la incorporación de pequeñas formaciones árabes y cristianas.
La decisión les permitió expandir sus áreas de control hacia regiones y provincias con un carácter tribal.
Trás cinco años de creadas con el soporte de Estados Unidos, esos grupos lograron controlar cerca de un tercio del territorio sirio y determinaron un sistema administrativo para gobernar toda esta área y expandir la llamada Administración Autónoma en el noreste del país, localizadas en Hasakeh, Ain al-Arab (Kobani) y Afrin.
Para 2016, este experimento se transformó en la Federación del noreste de Siria, luego realizar elecciones municipales sobre esta base. Sin embargo, retrocedieron por las presiones locales y regionales, así como las acusaciones de separatismo.
A principio de este año, anunciaron un nuevo formato administrativo, en el cual unificaron todas las áreas bajo su control con el nombre de Región del noreste de Siria y aprobaron una constitución llamada "Contrato Social", en un intento de replicar la experiencia del Kurdistán iraquí y convertirlo en una realidad impuesta.
Esto se hizo sin ningún respaldo o cobertura del aliado estadounidense, debido a la sensibilidad del tema para Turquía.
Igualmente, coincidió con la creación de una Comisión Suprema Electoral y un Tribunal Constitucional para proteger el Contrato Social y establecer una fecha para las elecciones de la nueva entidad administrativa del consejo local, fijadas para fines del próximo mes de mayo.
Mientras, Damasco ignoró esto política y mediáticamente considerando esencialmente a las FDS, las cuales se establecieron en esta región como tropas "separatistas".
Sin embargo, Estados Unidos, aunque no apoyó de forma pública a los kurdos en su nuevo enfoque, tampoco los presionó para al menos posponerlo, y no irritar a Ankara y evitar una escalada en las áreas del noreste sirio bajo el control kurdo.
Quizás los kurdos intentan lograr uno de dos objetivos con este enfoque. El primero es llevar a cabo una maniobra política mediante la implementación del plan electoral, para internamente presionar su participación en los diálogos y conferencias sobre la solución siria, levantar el veto turco e imponer la política de facto mediante la consolidación de la estructura administrativa de sus áreas de control.
Estos cambios administrativos kurdos, acompañados de elecciones, se realizan sin ningún reconocimiento local o internacional, en medio de una convergencia entre Estados Unidos y Turquía, que recientemente llevó a Suecia a unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Por lo tanto, el enfoque también puede interpretarse como una presión sobre Washington para perturbar su reciente acercamiento con sus aliados turcos.
El investigador kurdo, Farid Saadoun, declaró a Al Mayadeen que la Administración Autónoma tiene su propio proyecto y aplica sus ideas, planes, programas e ideología sin pensar en las consecuencias.
Destacó que las medidas autónomas enfrentaron oposición desde su establecimiento por parte de los partidos del Consejo Nacional Kurdo, incluso del gobierno sirio, y no participaron ni reconocieron ninguna elección realizada por la Administración Autónoma.
Señaló que están decididos a llevar a cabo sus elecciones, independientemente de si son justas o no, o si están bajo vigilancia o no de partes neutrales.
Tampoco les importa implementarlas y aplicar sus planes sin retroceder, sin tener en cuenta los riesgos que enfrenten de cualquier otra parte, en referencia a las continuas amenazas de Ankara contra ellos.
Estos comicios no son los primeros en la región, en las cuales participan los que deseen sin ningún tipo de presión.
De acuerdo con Farid Saadoun, lo importante para ellos es formar consejos locales y legislativos, y seguir sus planes lejos de cualquier amenaza.
Parece que la Administración Autónoma trata de aprovechar sus relaciones con la Casa Blanca y Occidente, y la presencia de la Coalición Internacional en sus áreas controladas en Siria, para beneficiarse política e internamente.
No obstante, todos los indicios sugieren que esto no es factible dada la hostilidad absoluta de Turquía hacia este proyecto, y la falta de lógica en que Occidente y la OTAN abandonen a Ankara por las FDS y su programa en Siria.