Venezuela ordena cierre de todas las sedes diplomáticas en Ecuador
El presidente Nicolás Maduro hizo este anuncio durante la reunión extraordinaria de jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños realizada este martes para abordar la violación ecuatoriana.
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El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó el cierre de la embajada y consulados de su país en Ecuador en solidaridad con México, luego de la irrupción de la fuerza pública de la nación suramericana en la sede diplomática en Quito el pasado 5 de abril.
La acción tuvo como objetivo detener al exvicepresidente Jorge Glas, quien recibió refugio y asilo allí.
Maduro hizo el anuncio durante la reunión extraordinaria de jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños realizada este martes para abordar la violación ecuatoriana.
#Ahora Venezuela retorna a Caracas todo su personal diplomático en la Embajada en Ecuador, así como de los Consulados de Quito y Guayaquil.
— Yvan Gil (@yvangil) April 16, 2024
De igual forma hemos recibido la instrucción del Presidente @NicolasMaduro de iniciar acciones para apoyar la propuesta de #México de…
El mandatario ordenó al encargado de Negocios, profesor Pedro Sassone, regresar a Caracas hasta tanto sea restituido el derecho internacional de manera expresa en Ecuador.
Por otro lado, manifestó su apoyo pleno a la propuesta de México de expulsar a Ecuador de la Organización de Naciones Unidas.
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A juicio de Maduro, la suspensión debe mantenerse a la espera de que Ecuador pida disculpas ante la comunidad internacional y restituya la situación a su estado legal original: la vuelta de Glas a la embajada, reconocerle el asilo político y permitirle salir del país hacia México.
El gobernante venezolano reprochó a su par Daniel Noboa, por no haber dado la cara este martes ante la Celac y asumir su responsabilidad frente a Ecuador, América Latina, el Caribe y el mundo.
Maduro describió las declaraciones de Noboa de no arrepentirse de ordenar el asalto a la embajada como un acto de provocación contra México, el derecho internacional y un desprecio absoluto a todo el entramado jurídico.
