Ejército de Turquía enfrenta ataques en el norte de Siria
Dos muertos, decenas de heridos y propiedades destruidas fue el saldo de las hostilidades desatadas entre efectivos armados y soldados turcos en zonas rurales de Alepo e Idlib. También en territorio vecino pretenden desestabilizar con violencia las relaciones entre ambas naciones.
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Ejército de Turquía enfrenta ataques en el norte de Siria
En zonas de la campiña de Alepo e Idlib, en el norte de Siria, se produjeron manifestaciones contra el ejército ocupante de Turquía y ataques a edificios administrados por ese gobierno.
Según confirmaron fuentes de la red Al Mayadeen, además de las protestas hubo violentos enfrentamientos en Afrin, en el cruce de Bab al-Salama, entre el ejército turco y efectivos armados locales, quienes abrieron fuego contra vehículos blindados y se escucharon explosiones ocasionadas por proyectiles RPG.
Los militantes irrumpieron en la sede del gobernador turco en esa región y además atacaron cuarteles y puntos de las tropas de Ankara, quienes a su vez utilizaron munición real en su respuesta, lo cual provocó heridas a varios asaltantes, según informaron las fuentes de Al Mayadeen.
Mientras tanto, la información preliminar reveló dos muertes entre los atacantes, además de decenas de heridos, solo en Afrin.
En la zona de Atareb, el ejército turco dispersó una manifestación frente a uno de los puntos de reunión de sus fuerzas, lo cual dejó varios heridos, según las fuentes.
Los atacantes tomaron el control de un vehículo blindado, e hicieron huir a sus tripulantes; e irrumpieron en el edificio de correos en la ciudad de Al-Rai, al norte de Alepo, y expulsaron a sus empleados.
De igual modo sabotearon camiones turcos en la ciudad, golpearon a los conductores y quitaron banderas en los edificios gubernamentales administrados por Ankara en la ciudad de Al-Bab, en el campo de Alepo.
Otra protesta con armas tuvo lugar frente al edificio de Defensa Civil en la ciudad de Azaz, al norte de Alepo, donde exigieron a sus empleados evacuar el edificio y regresar a su propio territorio.
Intentos de desestabilización en Turquía
Paralelamente, Turquía cerró hasta nuevo aviso los cruces de Al-Rai, Bab Al-Salama y Jarabulus, en el campo de Alepo.
En cuanto a Idlib, el grupo terrorista Hay'at Tahrir al-Sham, liderado por Abu Muhammad al-Goulani, cerró las carreteras ante los manifestantes que se dirigían al cruce de Bab al-Hawa, al norte de Idlib, que es el único cruce que Turquía no cerró, debido a los acontecimientos en el campo de Alepo.
Asimismo, el grupo paramilitar envió numerosos refuerzos a Bab al-Hawa, para evitar que los manifestantes atacaran a las fuerzas de Ankara en el cruce, en momentos en que uno de sus miembros quemaba la bandera turca.
A la luz de la escalada de tensiones, el mando militar turco, envió refuerzos al norte de Siria, en dirección a los pasos fronterizos con Idlib y Alepo, en medio de informes de cortes de servicios de Internet en la región.
Los activistas convocaron protestas y bloquearon carreteras a las nuevas patrullas para impedirles el cumplimiento de sus misiones, hasta lograr del gobierno ocupante la promesa de no atacar a los refugiados sirios.
Por su parte, el jefe de la Oficina de Medios de la Presidencia turca, Fakhruddin Altoun, advirtió sobre estos intentos de provocar el caos mediante “actividades de incitación destinadas a poner a prueba el orden público en el país.
Altoun aseguró seguir de cerca la actual situación, cuyo objetivo es desestabilizar al país a costa de los refugiados sirios.
Este lunes, un nutrido grupo de turcos atacó casas, tiendas y automóviles de propietarios sirios en el estado de Kayseri, en respuesta a una supuesta agresión de un hombre sirio a una niña turca.
Tal hecho fue negado por las autoridades locales, quienes trataron los rumores como un intento de sembrar discordia entre ciudadanos de ambas nacionalidades.
El Ministerio del Interior del gobierno de Ankara confirmó la detención de decenas de participantes en los actos vandálicos contra propiedades sirias entre el domingo y la mañana de este lunes.
Días atrás, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció su apertura a nuevas oportunidades para restablecer las relaciones diplomáticas con Siria, y la disposición de trabajar en el desarrollo de otros vínculos, lo cual incluiría una posible reunión con el mandatario Bashar al-Assad.
