EE. UU. negó gratificaciones a varios soldados heridos en Irak
La agencia CBS entrevistó a veteranos de guerra a quienes Washington rehusó entregar el premio Corazón Púrpura, para no reconocer el alto impacto del ataque iraní de enero de 2020, en respuesta al asesinato del general Qasem Soleimanei.
De las decenas de soldados de Estados Unidos que resultaron heridos en 2020 durante el ataque de Irán a la base de Ain al-Assad, en Irak, muchos fueron ignorados por su propio gobierno y sufren problemas de salud y abandono considerables.
La agencia CBS News realizó una investigación sobre el tema a partir del testimonio de varios afectados, quienes relataron sus actuales dolencias, como fallos en la visión y audición, constantes dolores de cabeza y pérdida de la memoria, y sin embargo les negaron el premio Corazón Purpura, destinado a quienes sufren lesiones en combate.
Sus heridas fueron causadas por los misiles balísticos lanzados por Irán el 8 de enero de 2020 (en respuesta al asesinato del líder de la fuerza Quds, Qasem Soleimanei), considerado el golpe de mayor envergadura contra las fuerzas estadounidenses en toda su historia.
Los sobrevivientes entrevistados ahora por CBS News calificaron de "milagroso" que nadie hubiera muerto en esa acción, pero no pocos quedaron con lesiones cerebrales traumáticas, las cuales desestructuraron su personalidad, su salud y hasta la capacidad de mantenerse en el ejécito en algunos casos.
Esta investigación de la agencia demostró cómo decenas de soldados heridos ese día no cuentan con los beneficios médicos asociados a ese premio, aunque cumplieran los requisitos de elegibilidad.
Al cuestionar sobre este asunto al Departamento de Defensa, la respuesta a la agencia de noticias fue inconclusa: el Comando de Recursos Humanos del Ejército reconsidera en la actualidad las solicitudes pendientes, en función del mérito individual de los postulados, "de acuerdo con las regulaciones del Ejército".
En esa revisión incluirán, segón el portavoz del Comando, a soldados y oficiales fallecidos, incluso quienes se quitaron la vida ante su difícil situación al regresar a América.
Los entevistados consideraron la decisión de ignorar sus solicitudes un intento de Washington de evitar una nueva escalada con Irán.
Además, con esas omisiones intentaban proteger la imagen del expresidente Trump, quien restó importancia al estado clínico de los heridos y durante una conferencia de prensa se refirió solo a "algunos dolores de cabeza".
La agencia pudo constatar que sólo recibieron el Corazón Púrpura los heridos evacuados de inmediato, no quienes permanecieron más tiempo, incluso heridos.
El reclamo de los soldados y oficiales por ser condecorados va más allá del orgullo ante su famillia y país, pues este premio implica beneficios de por vida, como atención médica prioritaria, préstamos para la casa, preferencias para la contratación federal y matrículas universitarias libres de costo en pregrado y posgrado.