Sureños en Líbano resisten ocupación israelí pese a ataques y heridos
El Ministerio de Salud de Líbano informó sobre cinco civiles heridos, dos de gravedad, en un ataque con dron israelí en las afueras de Majdal Selm, cerca del valle de al-Slouqi.
Las fuerzas de ocupación israelí mantienen sus violaciones al alto al fuego en Líbano e intensificaron este miércoles sus agresiones contra aldeas en el sur, y destruyeron viviendas y tierras agrícolas.
El Ministerio de Salud de Líbano informó sobre cinco civiles heridos, dos de gravedad, en un ataque con dron israelí en las afueras de Majdal Selm, cerca del valle de al-Slouqi.
Mientras tanto, una excavadora militar enemiga realizó operaciones de nivelación en la entrada occidental de Mais El Jabal, superando el perímetro de la misión de la ONU en Líbano (Unifil).
Además, las fuerzas ocupantes llevaron a cabo extensas excavaciones en las afueras de Marwahin, protegidas por un tanque Merkava, y destruyeron un pozo en Hula mientras levantan barreras de tierra.
En Talousa, otro dron de la ocupación lanzó tres bombas que hirieron una persona y dañaron una excavadora y un camión. Además, incendiaron casas entre Qantara y Taybeh.
Pese a estos ataques, los residentes de Maroun al-Ras y de todo el sur libanés intentan ingresar a sus aldeas desde el noreste para recuperar los cuerpos de sus fallecidos.
Según el corresponsal de Al Mayadeen, lograron entrar por rutas alternativas, a pesar de la presencia de soldados israelíes en la entrada norte.
Durante la incursión, un civil resultó herido por disparos enemigos y arrestaron a dos personas.
Testigos reportaron que las tropas israelíes abrieron fuego coincidiendo con la entrada de los habitantes.
Uno de los residentes de Maroun al-Ras afirmó: "Nuestro regreso es nuestra decisión, liberaremos nuestra tierra con piedras y aceite hirviendo, como lo hicimos en los años 80".
Simultáneamente, los habitantes de Yaroun también se preparaban para regresar a su localidad por el acceso norte y reafirmaron su determinación con respaldo del ejército libanés.
La Agencia Nacional de Noticias informó que en Kfar Kila, ciudadanos instalaron una carpa en la carretera de Kherdali, en el cruce de Deirmimas-Qlayaa, anunciando que permanecerían allí hasta la retirada completa de las tropas israelíes.
El Ministerio de Salud libanés confirmó que los ataques del martes dejaron un saldo de 36 heridos, distribuidos de la siguiente manera: seis en Yaroun cuando intentaban regresar a su pueblo, 20 por un bombardeo en Nabatieh al-Fawqa y 10 en Zawtar.
Las agresiones israelíes a Nabatieh y Zawtar, llevadas a cabo en el transcurso de una hora el martes por la noche, constituyeron una nueva violación del alto el fuego.