El ministro de Defensa de Turquía, Yasar Güler, declaró este sábado que todas las ramas activas del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) en diversas regiones deben disolverse lo antes posible y entregar sus armas de inmediato y sin condiciones.

"No permitiremos que el proceso sea saboteado, explotado o prolongado", dijo sobre la disolución del PKK, y anunció la adopción de un "enfoque cauteloso y racional" como base del procedimiento.

Turquía exigió el 6 de marzo al Partido de los Trabajadores del Kurdistán que depositara las armas "de inmediato y sin condiciones", una semana después de que su líder, Abdullah Öcalan, llamara a disolver la organización.

Fuentes del Ministerio de Defensa turco afirmaron que el PKK comprendió tarde que no puede alcanzar sus objetivos a través del terrorismo y que llegó la hora de disolverse.

Öcalan, quien cumple una condena de prisión perpetua en Turquía, llamó en una carta escrita en turco y kurdo a abandonar las armas, disolver el partido y poner fin al conflicto con Turquía, durante una visita de una delegación del Partido de la Igualdad y la Democracia de los Pueblos a la prisión.