Documenta ejecuciones sumarias de jóvenes alauitas en Siria
Las imágenes suministradas por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede de Londres, respaldaron informes previos sobre las sistemáticas masacres en la costa siria con el objetivo de cometer genocidio.
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Jóvenes alauitas arrodillados en el suelo mientras recibían insultos y golpizas por parte de los agentes de seguridad.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede de Londres, anunció la documentación de ejecuciones extrajudiciales de jóvenes desarmados de la comunidad alauita, perpetradas por elementos de seguridad en la aldea de Al-Shir, en la provincia de Latakia, el 7 de marzo.
Según el centro de moniterio de guerra con sede en Londres, las imágenes respaldaron sus informes previos sobre las sistemáticas masacres en la costa siria con el objetivo de cometer genocidio.
Algunos representantes de la administración actual en Damasco las calificaron como "excesos individuales".
Uno de los videos mostró a dos jóvenes arrodillados en el suelo mientras recibían insultos y golpizas a pesar de que ambos insistieron en no haber cometido ningún acto delictivo.
Otro material fílmico permitió constatar prácticas de torturas a cuatro civiles, incluidos dos ancianos. Uno de ellos fue obligado a besar el zapato de uno de los agentes.
Las demás representaciones registraron flagelaciones a civiles antes de ser ejecutados, cuerpos de víctimas y un joven a la espera para ser fusilado.
El número total de víctimas en las grabaciones ascendió a nueve, todos de la comunidad alauita.
La organización siria exigió al jefe de la fase de transición, Ahmed Al-Sharaa, llevar a cabo juicios urgentes y públicos contra los responsables, cuyos rostros aparecen claramente identificados.
Además, rechazó la remisión del caso a la Comisión de Investigación de la Verdad formada por Al-Sharaa, porque algunos de sus miembros justificaron las violaciones contra civiles kurdos en la región de Afrín y otros negaron la ocurrencia de las masacres.
Conforme al Observatorio, la falta de rendición de cuentas a los culpables podría incentivar la comisión de nuevos crímenes.
La persistencia de la violencia sectaria sistemática en Siria amenaza la convivencia civil en áreas donde predominan las comunidades alauitas, donde fueron martirizados más de mil 500 habitantes.