La inteligencia del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) arrestó a un  espía vinculado a servicios extranjeros en la provincia de Mazandarán, en el norte de Irán.

Según fuentes oficiales, el detenido coordinaba operaciones terroristas desde el exterior con el objetivo de desestabilizar al país.

Durante una rueda de prensa celebrada este sábado, el portavoz del poder judicial iraní, Asghar Jahangir, informó que se identificaron  redes hostiles infiltradas en el territorio nacional.

Confirmó que el caso se encuentra bajo seguimiento riguroso, y que se revelarán más detalles a la ciudadanía en cuanto concluyan las investigaciones.

Datos clave y avances en inteligencia

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Jahangir aseguró que las fuerzas de seguridad e inteligencia han obtenido información sensible y valiosa durante las pesquisas.

El poder judicial, indicó, actuará con firmeza, rapidez y justicia en todos los casos relacionados con traición o espionaje, en línea con la legislación nacional.

Sobre los procedimientos legales, garantizó que la población será informada cuando se emitan las sentencias definitivas, aunque reconoció que la complejidad técnica y los desafíos de seguridad pueden extender los tiempos de resolución judicial.

 

 

 

 

 

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El funcionario también denunció que se detectaron individuos que intentaron sembrar el pánico a través de las redes sociales durante la reciente agresión israelí contra Irán.

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Añadió que los responsables fueron identificados y procesados conforme a la ley.

Consultado sobre si el ataque israelí contra la prisión de Evin buscaba eliminar a espías detenidos, Jahangir rechazó confirmar esa hipótesis, pero calificó la ofensiva como un acto terrorista y un crimen contra la humanidad, incompatible con cualquier norma del derecho internacional.