Durante los primeros días de noviembre, nueve incursiones israelíes tuvieron lugar en territorio sirio, con la participación de 32 vehículos y tanques militares del ejército de ocupación.

Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, unidades israelíes ingresaron entre el 1 y el 2 de noviembre a aldeas fronterizas que no veían incursiones similares desde hacía meses.

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Las fuerzas de ocupación realizaron registros, instalaron controles temporales y abrieron fuego al aire para dispersar a civiles durante una de las incursiones.

El organismo destacó que estas incursiones coincidieron con la detención de civiles en la campiña occidental de Daraa.

Además, calificó los hechos como una escalada militar significativa en zonas cercanas a Quneitra y el oeste de la provincia.

También señaló el creciente estado de ansiedad entre los residentes locales, agravado por la ausencia de una respuesta oficial y la repetición constante de incursiones a lo largo de la línea de separación con el Golán sirio ocupado.