Bahreiníes conmemoran el Día Mundial de Al-Quds en respaldo a la causa palestina
Durante las marchas, los manifestantes portaron pancartas en las que expresaron su desacuerdo con el llamado “acuerdo del siglo”, promovido por EE.UU., supuestamente para solventar el conflicto palestino-israelí. También condenaron la Conferencia de Manama, a celebrarse a fines de este mes.

Los bahreiníes salieron el viernes a las calles del país para conmemorar el Día Mundial de Al-Quds (Jerusalén) y mostrar su apoyo a los palestinos.
Durante las marchas, los manifestantes portaron pancartas en las que expresaron su desacuerdo con el llamado “Acuerdo del siglo”, promovido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, supuestamente, para solucionar el conflicto palestino-israelí.
Las manifestaciones se produjeron mientras las condiciones de seguridad impuestas por el régimen de los Al Jalifa restringieron la libertad de actuación de los bahreiníes en las concentraciones en apoyo a Palestina.
Para evitar choques con las fuerzas del orden, los bahreiníes realizaron las marchas tras el rezo matutino de este sábado.
Los participantes en las movilizaciones, además, llevaban carteles con imágenes del clérigo chiita de Bafréin, el cheikh Isa Ahmad Qasem.
El respaldo de los bahreiníes a la nación palestina se hizo evidente a pocas semanas de la celebración de un “taller” convocado por la Casa Blanca y titulado Paz hacia la Prosperidad que tendrá lugar los días 25 y 26 de junio en Manama, la capital, que tiene como fin “impulsar el apoyo a posibles inversiones económicas” que apuntalen el plan de Trump.
"El Gobierno de Bahrein no tiene derecho a ser anfitrión de la conferencia del enemigo sionista, que recuerda la declaración de Balfour y (la cumbre) Camp David”, declara Al-Wefaq, principal partido opositor bahreiní.
En este contexto, Al-Wefaq también emitió una declaración con ocasión del Día Mundial de Al-Quds, en la que señaló que cualquier país que deje de apoyar la causa palestina, “perderá prácticamente su legitimidad” y pondrá en cuestión su “identidad humana”.
Varias filtraciones han permitido saber que el acuerdo niega de hecho el derecho al retorno de los refugiados palestinos, entre otras medidas prosionistas, y ni siquiera contemplan la existencia de un Estado palestino separado y soberano.