Iglesia Maronita: Prioridad para elegir un presidente del país y evitar una guerra entre Arabia Saudita e Irán, luego de la ruptura de relaciones diplomáticas
El patriarca de la Iglesia Maronita, cardenal Beshara Rahi, insistió hoy a los políticos libaneses para que abandonen sus intereses sectarios y partidistas, a fin de priorizar la elección del presidente y reactivar las instituciones estatales.

Durante el sermón de la misa de la Epifanía del Señor, el prelado reiteró su condena al vacío en la jefatura del Estado que sufre El Líbano desde que el ex presidente Michel Sleiman concluyó su mandato constitucional, el 25 de mayo de 2014.
"El pueblo libanés rechaza pasar otro año sin un presidente. Las elecciones deben ser una máxima prioridad", remarcó Rahi al urgir a los funcionarios y líderes políticos a "dejar de depender de potencias extranjeras y elegir un nuevo jefe de Estado".
La exhortación se interpretó como una referencia al impasse que vive este país árabe desde hace más de año y medio, lo que ha impedido que los diputados elijan al máximo gobernante, después de fracasar 33 convocatorias parlamentarias para votar.
De hecho, llamó también a impulsar el trabajo árabe e internacional para detener todas las guerras en Palestina, Iraq, Siria y Yemen, y expresó su esperanza de que pueda evitarse una guerra entre Arabia Saudita e Irán, luego de la ruptura de relaciones diplomáticas por parte de Riad el pasado domingo.
El reino wahabita y la república islámica, enfrentados tras la ejecución por la dinastía Al-Saud del clérigo chiita Nemr Baker Al-Nemr, son las potencias regionales con mayor influencia en El Líbano, y a ambos se les achaca, por algunos obseradores, parte de culpa en los desacuerdos de los principales grupos políticos.
Riad tiene gran afinidad con Mustaqbal (Futuro), que lidera el exprimer ministro sunnita Saad Hariri, y Teherán es el principal aliado de la Resistencia de Hizbulah (Partido de Dios). Ambas formaciones integran el gobierno y encabezan los dos mayores bloques legislativo.
Precisamente, algunas fuentes citadas aseguraron que la solución a problemas domésticos, como el presidencial y la exportación de la basura, se retrasarán debido a la tensión entre sauditas e iraníes, aunque sin llegar a interrumpir las sesiones de diálogo de Hizbulah y Mustaqbal.
"Necesitamos hoy más que nunca el diálogo, las tensiones políticas en la región aumentarán día tras día, pero hay un entendimiento implícito entre las partes locales de que la seguridad y estabilidad internas no deben afectarse por esos sucesos", comentó a dichas fuentes un miembro dirigente de Hizbulah.