El arzobispo palestino Atallah Hanna, del Patriarcado greco-ortodoxo Sebastián en Jerusalén, confirmó que la ocupación israelí es responsable de su envenenamiento.

Medios jordanos informaron que obispo Hanna fue trasladado el lunes de Jerusalén a Jordania para recibir tratamiento médico.

La agencia Ammon citó al Director General del Hospital de Jordania, Abdullah Al-Bashir, quien expresó que el obispo fue trasladado apresuradamente a Jordania, donde "hay sospechas de su veneno".

El obispo Hanna confirmó a Al-Mayadeen el domingo que viajaría a Jordania para recibir tratamiento porque su estado de salud no acepta aplazamiento.

El experto político Alif Sabbagh anunció que existen dudas sobre el intento de asesinar al obispo Atallah Hanna a través de un material que se roció en las cercanías de su casa.

En entrevista con Al-Mayadeen, Sabbagh señaló que la sustancia tóxica que se usó en las cercanías de la casa del obispo Hanna está prohibida internacionalmente, y afecta el sistema nervioso del cuerpo humano.

Por lo tanto, no es una coincidencia que el Obispo Hanna no pueda levantarse de su cama ni caminar normalmente.

El obispo fue expuesto a un problema de salud después de ser envenenado por inhalación de productos químicos, y como resultado, fue trasladado a un hospital de Jerusalén.

Explicó que fue envenenado por quienes estaban dentro de la casa, como resultado de rociar pesticidas químicos, gases tóxicos y otras sustancias cuya naturaleza aún no se ha identificado.

"Ningún conspirador o agresor podrá socavar nuestra presencia y nuestro mensaje", dijo Hanna.

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