El presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, anunció que su país tiene un plan listo para reunir pronto a las partes libias en conflicto.

Tebboune señaló en reunión con los medios locales, que "todas las partes en la crisis libia están de acuerdo con la mediación argelina", y subrayó que la causa de la crisis es la "interferencia externa". 

En cuanto a los asuntos internos, Tebboune advirtió a los manifestantes de "los intentos de infiltración dirigidos a presionarlos para que cometan violencia".

El presidente argelino también recomendó a los jóvenes manifestantes "ser cautelosos porque hay signos de penetración lanzados desde dentro y fuera del país ". 

"El movimiento es un fenómeno saludable y salvó al país del desastre", señaló.

Tebboune resaltó la firma de decreto que convierte el 22 de febrero en una jornada nacional y día feriado pagado, bajo el nombre de “Día nacional de Hermandad y Cohesión entre el Pueblo y su Ejército por la Democracia".

Las declaraciones de Tebboune se producen en el contexto de la reactivación de los manifestantes este viernes, en el primer aniversario del movimiento que llevó al ex presidente Abdelaziz Bouteflika a renunciar.