Al atacar tres instalaciones nucleares iraníes –en Fordow, Natanz e Isfahán– el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado una vez más que está completamente loco.

También ha confirmado que es un títere sionista.

En la madrugada del 22 de junio (hora de Teherán), aviones estadounidenses lanzaron bombas de 30 mil libras sobre las instalaciones nucleares de Irán.

También se dispararon misiles de crucero Tomahawk desde un submarino en el Océano Índico.

Si el objetivo era destruir el programa nuclear pacífico de Irán, los informes iniciales sugieren que tal vez no se haya logrado.

Irán ya había trasladado la mayor parte de su uranio enriquecido a sitios seguros antes de que los bombarderos estadounidenses atacaran.

Para demostrar lo trastornado que está, Trump dijo que Irán debe hacer la paz o “atacaremos” otros objetivos.

Habló en la Casa Blanca después de los ataques estadounidenses.

Esto lo hace culpable según el derecho internacional, que prohíbe los ataques a las instalaciones nucleares de cualquier país.

Dos preguntas predominan en la mente de la gente: primero, ¿cuánto daño causaron estos ataques? Segundo, ¿cuál sería la respuesta de Irán?

El Organismo Internacional de Energía Atómica ( OIEA ) dijo en un comunicado el sábado por la noche (21 de junio) que los ataques estadounidenses al complejo nuclear de Isfahán alcanzaron seis edificios.

Cuatro edificios resultaron dañados previamente en ataques israelíes.

Sin embargo, según el OIEA, contenían poco o ningún material nuclear.

“Las instalaciones atacadas hoy [noche del 21 y 22 de junio] no contenían material nuclear o contenían pequeñas cantidades de uranio natural o poco enriquecido, lo que significa que cualquier contaminación radiactiva se limita a los edificios dañados o destruidos”.

La instalación nuclear de Fordow, cerca de Qom, que también fue atacada, está enterrada en las profundidades de una montaña.

Todo el uranio enriquecido ya había sido sacado del sitio mucho antes de que el rabioso Trump ordenara los ataques, según altos funcionarios iraníes.

¿Se produjeron daños en las centrifugadoras?

Si bien Irán no ha hecho comentarios oficiales al respecto, el hecho es que las centrifugadoras están enterradas a cientos de pies bajo tierra, por lo que ni siquiera las bombas antibúnkeres estadounidenses pueden penetrar esa profundidad.

Lo que hizo Estados Unidos fue dañar algunos edificios de la superficie.

La otra pregunta es: ¿qué forma adoptaría la respuesta de represalia de Irán al último escándalo estadounidense?

Los funcionarios estadounidenses, e incluso israelíes, se están preparando para una respuesta severa.

Irán ya ha lanzado misiles multiojivales Khyber Shekan (conquistador de Khyber) contra la entidad sionista.

Esta es la primera vez que Irán utiliza estos misiles supersónicos.

En la madrugada del 22 de junio fueron atacados objetivos militares y estratégicos en "Tel Aviv".

Los ocupantes sionistas se han visto obligados a buscar refugio en búnkeres subterráneos.

Los medios israelíes informaron que al menos 81 personas resultaron heridas cuando los misiles impactaron "Tel Aviv".

¡Las sirenas sonaron después de que los misiles impactaron!

En cuanto a las represalias de Teherán contra Estados Unidos, no debe haber duda de que se producirán.

El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) dio una pista cuando dijo que Estados Unidos se había colocado “en la primera línea de la agresión” al lanzar sus ataques.

En una declaración, el CGRI prometió que los “invasores” ahora deben “esperar respuestas que les traigan arrepentimiento”.

Continuó diciendo que la operación de represalia continuará “con precisión, intención y fuerza” apuntando a la infraestructura y centros estratégicos en Israel.

La declaración del CGRI calificó las bases militares estadounidenses en la región como un “punto de vulnerabilidad, no de fortaleza”.

La Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Kaja Kallas , también se unió al coro antiiraní diciendo que no se debe permitir que Teherán desarrolle un arma nuclear.

Irán no está fabricando una bomba, a pesar de las incesantes quejas de Benjamin Netanyahu desde 1995 de que Irán está a sólo unos meses de fabricar una bomba.

Lo alejados de la realidad que están los estadounidenses y sus aliados europeos se desprende de las declaraciones de Kallas.

En una publicación en X el domingo, instó a todas las partes a “dar un paso atrás, volver a la mesa de negociaciones y evitar una mayor escalada”.

Irán estaba negociando, aunque indirectamente, con Estados Unidos.

La sexta ronda de conversaciones estaba prevista para el 15 de junio en Omán cuando los criminales de guerra sionistas atacaron Irán el 13 de junio.

El último crimen de Estados Unidos contra Irán ha recibido una condena universal. Entre ellos se encuentran numerosos aliados de Estados Unidos, como Australia, Nueva Zelanda y Japón. Rusia y China también han condenado los ataques.

Mientras tanto, ¡los payasos que gobiernan Pakistán han nominado a Trump para el Premio Nobel de la Paz!