Bob Carr: La coalición occidental está en proceso de desmantelamiento y Al Assad está ganando
Al-Mayadeen entrevistó a Robert John Carr, más conocido como Bob Carr, un político australiano y actualmente es senador por el estado de Nueva Gales del Sur y fue Ministro de Relaciones Exteriores de su país hasta septiembre de 2013. Bob Carr nació el 28 de septiembre de 1947, en Matraville, Australia y milita en el Partido Laborista Australiano.

Al Mayadeen, a través de esta entrevista al ex ministro de Relaciones Exteriores de Australia, Bob Carr, trató con él diferentes temas, desde la última cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos hasta la reciente cumbre del G-7 y también los expedientes del Medio Oriente, como el expediente palestino y el expediente de la crisis siria; Carr consideró que las diferencias que surgieron entre Estados Unidos, por un lado, y sus aliados tradicionales, por el otro lado, muestran que Estados Unidos maltrata a sus aliados y que Estados Unidos bajo la administración de Trump adopta la doctrina de “Estados Unidos sola” y no “Estados Unidos primero”; Carr, quien se desempeñó como ministro de Asuntos Exteriores de Australia en el periodo 2012 - 2013, consideró que la alianza occidental se está fragmentando y que no está en el interés de Australia unirse a Estados Unidos en cualquier Guerra Fría contra China; Carr también habló de la impresión prevaleciente en la calle australiana de que Israel se conduce de una forma inhumana con los palestinos; también dijo que la postura occidental en Siria quedó expuesta después del surgimiento de grupos extremistas que luchan contra el régimen sirio y que Occidente quedó sorprendido por la fuerza que el presidente al Assad logró concentrar, señalando que Occidente se encuentra ante el hecho de que Hizbullah está combatiendo a la organización DAESH.

Al Mayadeen: hemos escuchado que se ha firmado un acuerdo entre el líder norcoreano y el presidente estadounidense Donald Trump. ¿Cree que nos encontramos ante el éxito (de esta cumbre)?
Carr: Todos esperamos que esta cumbre sea exitosa; me resulta irónico que después de tratar de romper el acuerdo nuclear con Irán, Trump aspire a alcanzar otro acuerdo nuclear; los integrantes del partido Demócrata en Estados Unidos revisarán este acuerdo para ver si es menos riguroso que el acuerdo alcanzado por su presidente a través de negociaciones con Teherán; queremos ver los detalles, así como que partes “se pueden cumplir”, qué lugares pueden visitar los inspectores, y qué dice este acuerdo sobre el alcance de los misiles, etc.… sin embargo, la hipótesis de lograr una comunicación entre un estado fallido por un lado y Estados Unidos y, de hecho, Occidente por el otro, es una suposición constructiva; también ayuda a responder la pregunta que plantea Kissinger: “¿Qué hace uno cuando un estado en particular se aleja de las normas internacionales?”.
Al Mayadeen: ¿Acaso no podrías colocar el tema en el contexto del intento de Estados Unidos de romper la alianza entre Corea del Norte y China, más cuando observamos la actitud en cierto grado hostil de Trump hacia China?
Carr: No, más bien creo que la explicación clara para el comportamiento de Estados Unidos es que Corea del Norte ha desarrollado no solo la capacidad nuclear, sino también la capacidad de transportar (las ojivas nucleares) por medio de misiles que pueden llegar a territorio estadounidense; por lo tanto, creo que los motivos estadounidenses son claros, y es que un estado fallido ha desarrollado capacidades misilistícas que podrían alcanzar territorio estadounidense.
Al Mayadeen: ya que usted está cerca de los chinos, y hasta donde sé, estuvo en China recientemente, ¿notó que la parte china estaba preocupada por esta cumbre?
Carr: no creo que nadie puede definir la posición propia de China; en relación con los intereses chinos, ellos no desean un colapso caótico del estado que se encuentra en sus fronteras (Corea del Norte), y ellos no quieren una península coreana unificada de la que surja como consecuencia un estado con tropas y bases estadounidenses en su frontera (la frontera de China); y los chinos tampoco quieren que Corea del Sur y Japón lleguen a la conclusión de que deben desarrollar una fuerza de disuasión nuclear; lo más importante es que los chinos quieren estabilidad y una situación “predecible” en sus fronteras; entonces ellos evaluarán lo sucedido como todos nosotros simplemente lo hacemos; ellos no quieren un ataque estadounidense preventivo contra Corea del Norte con todas las consecuencias que esto pueda tener.

Al Mayadeen: refiriéndonos a otro tema y es la cumbre del G-7, ¿estamos realmente presenciando lo que algunos llamarían una disolución de la alianza occidental si se puede expresar de esta manera?
Carr: para ser más preciso, Estados Unidos dice que no quiere incomodarse liderando un orden mundial; Estados Unidos había pedido que no se haga referencia (al término) “orden internacional global” en la declaración emitida por la cumbre del G-7; Estados Unidos atropelló de sus aliados y ha tratado a la institución formada por el G7 con una gran falta de respeto; esto no es Estados Unidos primero sino Estados Unidos sola; son los seis países más uno; y si colocamos todas las otras consideraciones a un lado, se nota que el lenguaje corporal (de Trump) y su manera de participar expresó su odio hacia la red de alianzas estadounidenses creadas bajo patrocinio (estadunidense); Estados Unidos bajo la conducción de Trump abandona la hipótesis de liderar un sistema de alianzas, y (la pregunta es) ¿cómo reconstruiremos este sistema de alianzas?
Al Mayadeen: entonces ¿usted realmente cree que la alianza occidental está en proceso de fragmentación?
Carr: no puedo decir lo contrario.
Al Mayadeen: y ¿Dónde debería posicionarse Australia según su criterio?
Carr: Australia debería cuidar sus intereses; tenemos interés en fortalecer nuestras relaciones económicas y de seguridad con Estados Unidos; si Canadá está involucrada en una guerra verbal con Estados Unidos sobre el comercio, esto en realidad no nos afecta; por lo tanto, creo que nuestra diplomacia dicta que cuidemos nuestros intereses; Estados Unidos se retiró del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica y tenemos que convivir con este hecho.
Al Mayadeen: lo que observamos ahora con la administración Trump en relación con el comercio, los aranceles y la guerra comercial con China, al mismo tiempo, en relación con la escalada en el Mar del Sur de China entre Estados Unidos y China; notamos al parecer que hay un aumento en el nivel de tensión entre Estados Unidos y China, en mi opinión esto coloca a Australia ante una posición peculiar y distintiva y por lo tanto, tendría que escoger que dirección tomar.
Carr: para eso está la diplomacia.
Al Mayadeen: si, pero ¿si se ven obligados a elegir?
Carr: la diplomacia existe para evitar la necesidad de tomar una decisión difícil.
Al Mayadeen: o sea ¿cree que la parte australiana tendrá éxito en lograr un equilibrio en este contexto (entre las relaciones con Estados Unidos, por un lado, y con China, por el otro)?
Carr: no, no necesariamente porque no creo que mostramos mucha diplomacia eficiente; sin embargo, si mostráramos cierta eficiencia, podríamos lograr un equilibrio por medio de las negociaciones con Estados Unidos, a la que observamos con signos de deterioro, por un lado, y con China, que sin duda está en vías de convertirse en la economía más grande del mundo, por el otro lado.
Al Mayadeen: entonces, esto me conduce a hacer una pregunta elemental y es que ¿ciertamente no le conviene a Australia tomar partido con Estados Unidos contra China?
Carr: lo diré de esta manera: ciertamente no le conviene a Australia unirse a Estados Unidos en una guerra fría contra China y a cualquier política de contención dirigida contra China.

Al Mayadeen: con respecto a Palestina observamos asesinatos semanales de palestinos, ¿cómo describes la situación y cómo afecta esto a la reputación de (Israel)?
Carr: Creo que el impacto en la opinión pública australiana ha sido muy notable; escuchamos críticas contra (Israel) solo por su comportamiento en la frontera con Gaza; creo que uno de los motivos del cambio en la opinión pública australiana, como lo demuestran las encuestas de opinión que evidencian el apoyo a un estado palestino, es la respuesta desproporcionada de (Israel) a las sucesivas situaciones de emergencia en Gaza. Apoyo el derecho de (Israel) (a defenderse), dije esto cuando era ministro de Asuntos Exteriores y lo digo hoy, pero este derecho debe ejercerse de manera proporcionada; no tengo conocimiento de la existencia de ningún sistema de derecho internacional que justifique disparar contra los manifestantes, incluidos niños y personal médico en la frontera con Gaza.
Al Mayadeen: ¿Realmente estamos observando un cambio fundamental en la opinión pública australiana sobre este tema?
Carr: creo que hay una impresión en la calle en general de que Israel actuó de una manera inhumana, creo que esta impresión está arraigada, y opino que las escenas transmitidas por la televisión no son algo que (Israel) pueda reparar.

Al Mayadeen: según tengo entendido, ustedes en el Partido Laborista australiano puede estar en proceso de reconocer al estado palestino. ¿Se ha avanzado realmente en esta dirección?
Carr: aprobamos este proyecto en los congresos del Partido Laborista celebrados a nivel estatal; creo que mis colegas lograrán aprobar este proyecto en el congreso nacional del Partido Laborista programado para este año; se han celebrado cinco congresos del Partido Laborista a nivel estatal, y todas han adoptado la propuesta de que el próximo gobierno laborista tiene que reconocer a Palestina; Victoria es el único estado que ha rechazado ese proyecto durante el congreso del Partido Laborista de ese estado; entonces eso indica que es probable que el próximo congreso federal del Partido Laborista tome una decisión sobre el particular.
Al Mayadeen: escuché información de que existen lobbies, si es exacta la expresión, que le exigen al Partido Laborista australiano que considere a Hizbullah como una organización terrorista; estamos hablando de una clasificación de parte del Partido Laborista (no a nivel del gobierno australiano).
Carr: no creo que pudiéramos hacer una propuesta en este contexto.

Al Mayadeen: usted fue ministro de Relaciones Exteriores cuando comenzó la crisis siria; si retrocediéramos ahora en el tiempo, hay muchos que dicen que lo que sucedió en Siria fue producto de un plan occidental y que el objetivo era debilitar a Irán librándose de uno de sus aliados más importantes, basado en sus reuniones, por ejemplo, con Hillary Clinton que fue en ese entonces Secretaria de Estado, ¿Cuáles fueron sus conclusiones? y ¿Qué intentaba Occidente lograr en Siria?
Carr: no creo que Occidente fuera la fuerza principal detrás de la revolución contra el gobierno de al Assad; hubo un levantamiento y creo que se debía a factores relacionados con la situación interna siria; algunos creen que el cambio climático y la grave sequía que devastó el sector agrícola jugaron un papel; pero cuando se impide la celebración de elecciones libres, esto abre el camino para que la situación estalle; el asunto principal en mi papel como ministro de Relaciones Exteriores en aquel entonces era el logro de un alto el fuego y la formación de un gobierno de transición que tendría que obtener el apoyo para aprobar una nueva constitución y realizar elecciones libres, pero todo eso resultó ser una batalla perdida; había intentado en lo posible impulsar la aprobación de un tratado médico para hacer que todas las milicias acuerden: primero no atacar a los hospitales y a los que laboran en el campo de la salud, segundo permitir que los convoyes médicos se trasladen sin obstáculos en todo el país y tercero permitir el paso de los heridos y de los otros afectados sin ningún tipo de impedimento, pero lamentablemente el enviado especial de la ONU rehusó mirar este planteamiento, y si bien logré que la cumbre de los 10 países en San Petersburgo el año 2013 respaldara esta idea, no se pudo lograr ningún avance real sobre el particular.
Al Mayadeen: ¿Cree usted que Occidente no le dio una lectura correcta a la situación y no se dio cuenta de que había muchos extremistas entre los que protestaron o participaron en los acontecimientos que estallaron en Siria?
Carr: eso es cierto, creo que la postura occidental quedó muy expuesta debido al surgimiento de fuertes milicias extremistas como parte de la revolución contra al Assad; creo que Occidente también se sorprendió también de la fuerza militar que al Assad logró concentrar; por lo tanto, la guerra continuó y se convirtió en un espantoso desastre militar.

Al Mayadeen: cuando miras la situación ahora, ¿cuál cree usted que sería la política apropiada que Occidente debería adoptar en Siria?
Carr: la situación es muy difícil; al Assad triunfa, y la insistencia de Occidente sobre la partida de al Assad como condición previa no ha logrado nada; Occidente se enfrenta a la realidad de que Hizbullah combate a DAESH, y como me dijo un cristiano libanés, Hizbullah protege las fronteras de cualquier invasión de DAESH, por lo tanto, la situación está llena de ironía.
Al Mayadeen: ya que mencionaste que Hizbullah combate contra DAESH, cuando contemplas este asunto, ¿cómo te sientes?
Carr: no sé cómo debería sentirme, es el Medio Oriente.
Al Mayadeen: mencionó que al Assad está venciendo, ¿no significa eso que la opción más racional ahora es que Occidente acepte a al Assad y que trate con él?
Carr: no emitiré juicio al respecto; existe una horrorosa guerra civil y sus repercusiones humanitarias son espantosas.