Para comprender a “Israel” es necesario llamar la atención sobre cuestiones importantes tanto sobre su naturaleza, como sus decisiones; si no le prestamos atención a esto, cometeremos errores evaluando su proceder y cómo se conduce a si misma al suicidio y a la desaparición.

El enfoque científico y analítico debe tener en cuenta que “Israel” es un estado artificial y no es natural en su estructura, desarrollo y formación, al igual como lo es Estados Unidos, un estado y un régimen que fue estructurado mediante la fuerza, la coerción y la aniquilación de los pueblos originarios; por lo tanto, las estructuras, acciones y mecanismos de toma de decisiones en ambos estados no deben analizarse como emanados de estados tradicionales, establecidos, emergentes y basados en una acumulación histórica.

Sumado al hecho de que “Israel” no es un estado natural, se nota de que este se ha transformado en un estado extremista religioso y de derecha y ha caído en las garras de Benjamín Netanyahu, cuya única preocupación en cuanto a su cargo de dirigente, y lo único que busca de la guerra y del futuro, es protegerse a sí mismo y a su equipo, incluso si eso conduce a la destrucción y al fin de “Israel”; por estas dos razones y por muchas otras, lo encontramos en Gaza y su guerra, violando las reglas, y las enseñanzas de las escuelas militares en cuanto a la conducción de conflictos armados  de los ejércitos y de las sociedades.

Netanyahu y Yoav Gallant declararon la guerra considerándola existencial, asimismo, establecieron objetivos que eran imposibles de alcanzar, y luego lanzaron a su ejército a una guerra terrestre, desoyendo las recomendaciones de expertos en ciencias militares y en guerras, insistiendo en ello de manera terca a pesar de los fracasos y de las enormes pérdidas que ha sufrido el ejército, el estado y la sociedad israelí; cometiendo al mismo tiempo tonterías y aventuras con consecuencias no calculadas, una de las cuales es llevar a “Israel” a una trampa estratégica, involucrándola en una guerra de desgaste que no puede soportar.

En este contexto y a pesar de que toda la información obtenida y lo que dice la ciencia con sus diferentes escuelas, y a pesar del desarrollo de los acontecimientos y las realidades vividas, las cuales confirman todas la derrota de “Israel” en cualquier guerra contra la resistencia libanesa.

A pesar de las advertencias de israelíes y de lo que escribieron y dijeron sus expertos y sus figuras mediáticas, de que la fuerza de la resistencia en el Líbano es mil veces mayor que la de Gaza, así como su superficie, sus oportunidades, sus armas y sus hombres, y de que “Israel” después de 95 días de fracasos en Gaza, se ha vuelto cien veces más debilitada desde la operación del Diluvio de al Aqsa, sin embargo, Netanyahu y Gallant continúan amenazando y haciendo declaraciones sobre la intención de “Israel” de involucrarse, conduciéndose a una trampa estratégica y mortal en el Líbano.

¿Acaso lo haría? O estas son simplemente maniobras mediáticas, amenazas vacías e intimidación para que los mediadores y las delegaciones europeas que acuden en masa al Líbano las utilicen en un intento de obtener logros, a los que al Sayyed Nasrallah había puesto fin de manera contundente al afirmar de que, no habrá negociaciones, diálogo ni interacción, sino hasta después del alto al fuego en Gaza y su afirmación es categórica. 

Supongamos que Netanyahu insistiera en sus amenazas y condujera a “Israel” a la trampa estratégica e impusiera la guerra al Líbano, ¿cuál sería el resultado?

Para comenzar, se puede afirmar con certeza a partir de los datos fácticos actuales que “Israel” ejerció y utilizó todos los elementos a su alcance en Gaza y a pesar de ello está siendo derrotada, y también utilizó todos los elementos del poder de todos sus aliados y todos los líderes del mundo anglosajón se han unido a la misma, y llegaron las flotas y expertos estadounidenses, así como la fuerza aérea británica, miles de mercenarios, los marines y la Delta Force de la élite de las fuerzas estadounidenses, y a pesar de ello no se logró ninguna victoria ni ningún resultado palpable para “Israel”, entonces ¿Qué pasaría si se impusiera una guerra con el Líbano?

El eje de resistencia unió los frentes, unió los terrenos de lucha, coordinó sus fuegos y estableció el papel de cada frente, e impuso y está ganando una guerra en los mares y los corredores marítimos, e impuso reglas de enfrentamiento a las bases estadounidenses en Siria e Irak, y comenzó a hacer uso de la geografía y de las vastas extensiones que superan los tres millones de kilómetros cuadrados y no los 360 kilómetros dentro de los cuales se encuentra confinada Gaza; la geografía del Líbano y la resistencia están abiertas a Siria e Irak, así como son una extensión de Irán, y el partido tiene bases en Siria, Iraq, asimismo, tenemos las fuerzas de la Concentración Popular, el Ejército Árabe Sirio y sus fuerzas de apoyo que se encuentran preparadas para entablar el combate en caso de que se inicie una guerra con el Líbano; y están listos para participar y activar sus frentes con el fuego de su armamento que ha sido probado desde Irakhasta Haifa, Umm al Rashrash, el campo de Karish en el Mediterráneo y los puestos militares israelíes en el Golán; así como se han puesto a prueba los drones y misiles de los huthíes en el mar y en el sur de Palestina. 

En la devastadora guerra, la Guerra del Juicio Final, la geografía y la población desempeñarían un papel fundamental al momento de lograr resultados, y en ambas “Israel” es muy débil y no tiene un margen de maniobra para compensar;  el número de sionistas en Palestina no supera los cuatro millones, mientras que el número de pueblos involucrados en las arenas del eje de la resistencia supera los doscientos millones, y la geografía de Palestina no excede unos 27 mil kilómetros, gran parte de la misma está ocupada por palestinos, mientras que las áreas geográficas del eje de resistencia superan los tres millones de kilómetros cuadrados...

Cualquiera que sea el método, la lógica o la ciencia militar y de guerra, la derrota de “Israel” será rápida y terminante, y su desaparición sería cuestión de días, no de semanas o meses, incluso si se utilizan armas de destrucción masiva, ya que el eje de la resistencia por su geografía y población, puede tolerar semejante ataque, pero “Israel”, por las mismas dos razones, no puede soportar la pérdida de decenas de miles; y el eje y sus facciones si no han poseído armas nucleares y lo que se le parezca de armamento sucio, pueden apuntar a la costa de Haifa y sus depósitos de productos químicos, y pueden apuntar al reactor de Dimona.

La resistencia en el Líbano, aunque ha ofrecido ciento cincuenta mártires, entre cuadros y líderes, su estructura, armas y almacenes, que están llenos de cientos de miles de drones y misiles precisos y destructivos, y estos aún no han sido tocados, la guerra, ha revelado el potencial creativo en la ingeniería de las confrontaciones, y en los tipos de armas y objetivos en los que causó bajas, destruyendo la línea de defensa electrónica del enemigo y sus fortificaciones, y con sus ataques en contra de los cuarteles generales de comando y control, proporcionaron el escenario adecuado para iniciar ataques a gran escala para liberar Galilea y llegar a las afueras de “Tel Aviv”; asimismo es la preparación y disposición en el Golán, que está sólo a unos pocos kilómetros de Cisjordania, implementado los planes  y preparando al número de combatientes y la fuerza correspondiente para que esta que pueda coordinar con las fuerzas de al Radwan en el norte y poder hacer llegar hombres y armamento a Cisjordania, permitiendo que esta se levante, se rebele, y se convierta en el teatro de guerra que podrá propinar el tiro de gracia a “Israel”. 

Así se perciben  los hechos reales vividos y el equilibrio de fuerzas decisivos, y la guerra con su desenlace se decidirá rápidamente, “Israel” no tendrá la geografía, ni el liderazgo, ni los teatros de operaciones para concentrar sus fuerzas y maniobrar, ni para utilizar aviones y misiles para asegurar su protección y la protección de sus fuerzas y su frente interno.

¿Acaso han pasado por alto los generales de “Israel”, Estados Unidos y la Organización del Atlántico Norte (OTAN) estos hechos? La respuesta es ciertamente no, pero si Netanyahu procede y conduce a “Israel” a su propia masacre, esta sería a causa de sus propias características y es lo mismo que está haciendo en Gaza.

¿Dónde se ubican Estados Unidos, la OTAN e Irán de esta guerra?

Responderemos con hechos y datos reales y vividos...