Régimen de Al Jalifa ejecuta en Barhein a tres activistas pese a críticas internacionales
Ahmad al-Mulali, de 24 años, y Ali Hakim al-Arab, de 25 años, son dos de los tres ejecutados, que pese a insistir en su inocencia, fueron torturados durante su detención a manos de los agentes penitenciarios del régimen de Al Jalifa.

Barhein aplicó la sentencia a tres prisioneros, jóvenes activistas pro derechos humanos, condenados a muerte pese a constantes llamados de la comunidad internacional al régimen de Hamad bin Isa Al Jalifa para frenar el fallo.
Torturados durante su detención a manos de los agentes penitenciarios, Ahmad al-Mulali, de 24 años, y Ali Hakim al-Arab, de 25 años, son dos de los tres ejecutados que hasta último momento insistieron en su inocencia.
El disuelto partido opositor Al-Wefaq también confirmó este sábado la ejecución de esos activistas que protestaban contra las políticas del régimen barheiní.
La Fiscalía aseguró que la pena capital se cumplió bajo supuestos cargos de terrorismo, pues los culparon del asesinato de un agente de la Policía en 2017. El régimen de Al Jalifa se niega a entregar los cuerpos a sus familias, dicen medios locales.
Varias organizaciones pro derecho humanos, entre ellas Amnistía Internacional (AI), pidieron al régimen barheiní que frene otras ejecuciones confirmadas el pasado mes de mayo.
El Centro de Bahrein por los Derechos Humanos (BCHR) infrmó que se había concertado una reunión privada entre los condenados y sus familias, en el corredor de la muerte.
“Estas visitas privadas son un indicador muy peligroso del riesgo de la ejecución”, advirtió BCHR, mientras pedía al régimen de Al Jalifa clemencia para que no les aplicara la sentencia.
Las ejecuciones de este sábado son un eslabón más en la larga cadena de represión contra los opositores barheiníes.