“Washington está listo para la normalización completa de las relaciones con Irán y para mantener conversaciones sin condiciones previas”, declaró Jackie Wolcott, embajadora estadounidense ante las organizaciones mundiales en Viena, incluido el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), .

El comunicado estadounidense consideró que la expansión del programa nuclear de Irán es "un intento de chantajear a la comunidad internacional por dinero".

Señaló que "el camino tomado por de Irán solo aumentará el aislamiento en el escenario internacional y aumentará los riesgos que enfrenta".

El corresponsal de Al Mayadeen en Teherán informó que el presidente iraní, Hassan Rouhani, recibió a Emmanuel Bonneal, asesor diplomático de su homólogo francés.

Rouhani enfatizó que el país sigue manteniendo abierta la vía diplomática para resolver las crisis en torno al acuerdo nuclear.

Asimismo, defendió los pasos tomados por la República Islámica en respuesta a la pasividad de los europeos en cumplir sus promesas estipuladas en el acuerdo nuclear.

“Si las partes cumplen con sus obligaciones, Irán tomará nuevos pasos para cumplir sus compromisos”, dijo el mandatario.

Por su parte, Bonne señaló que "a pesar de las acciones estadounidenses, la fortaleza y posición de Irán en las ecuaciones regionales e internacionales ha experimentado un crecimiento notable".

El secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, Ali Shamjani, en una reunión mantenida este miércoles con Emmanuel Bonne, expresó que EE.UU. mantiene secuestrada la independencia de Europa, así que la Unión Europea (UE) debe hacer frente al unilateralismo estadounidense, defendiendo su identidad y autonomía.

El responsable iraní criticó “la inacción y la falta de voluntad” de Europa ante la salida “ilegal” de Estados Unidos del pacto, sellado en 2015 entre Irán y el Grupo 5+1.

Shamjani también defendió la decisión de Teherán de aumentar el enriquecimiento de uranio más allá de los límites establecidos por el pacto —3,67 %— y aseguró que la República Islámica no revertirá esta medida hasta que logre sus “derechos plenos” en virtud del acuerdo.

Destacó la paciencia de Irán ante el incumplimiento de la contraparte europea, y enfatizó que la medida se tomó en el marco de los artículos 26 y 36 del acuerdo que contemplan el derecho de Irán a suspender parte de sus compromisos.

Teherán, prosiguió, ya no desea ser el único país comprometido con este documento multilateral.

El funcionario iraní también calificó de fracasada la política de presión máxima de EE.UU. contra Teherán y señaló que el país es lo suficientemente capaz de superar los desafíos políticos, económicos y militares que enfrenta. “Así que no se puede hablar bajo presiones con Irán”, aseguró.

Bonne, a su vez, aseveró que no ha llegado a Irán como mediador y que tampoco transmite mensajes de Washington.

“Lo que quiere Emmanuel Macron es hallar una iniciativa para poner fin a la guerra económica impuesta por EE.UU. a Irán. El presidente francés cree que ello puede reducir las tensiones en el oeste de Asia”, subrayó el enviado galo.