El presidente de Irán, Hassan Rouhani, advirtió que su país no enfrentará un callejón sin salida debido a las sanciones y la presión que se le impone.

Durante su reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, en la capital iraní, Rouhani pidió a los países europeos que "enfrenten el terrorismo económico estadounidense contra Teherán y cumplan con sus obligaciones en virtud del acuerdo nuclear".

 

Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, dijo que la nueva tensión en la región es el resultado de "la guerra económica anunciada por Trump sobre Irán".

Zarif señaló - en conferencia de prensa conjunta con su homólogo alemán- que "Irán no iniciará ninguna guerra, pero quien la inicie contra nosotros no será el que la termine".

El canciller iraní señaló que existen objetivos comunes entre Irán, Alemania y Europa, a saber, "mantener el acuerdo nuclear y reducir la tensión en la región".

A su vez, Heiko Maas destacó que la posición de Alemania, Francia y Gran Bretaña es "mantener el acuerdo nuclear".

Indicó que la Unión Europea busca activar el canal financiero con Teherán para permitir que las empresas europeas permanezcan en Irán", y agregó: "Algunos países de la región sostienen conversaciones entre ellos y encuentran soluciones para eliminar la tensión".

Zarif consideró que "la ocupación israelí de Palestina y los Altos del Golán es apoyada por Estados Unidos, y esto es un gran problema".

Añadió que EE.UU. está buscando el acuerdo del siglo para aplastar los derechos del pueblo palestino y ello amenaza la seguridad de la región.