Imágenes tomadas por satélites rusos descubrieron una nueva fosa común con 300 tumbas fuera de la valla del campamento de refugiados de Rukban en Siria, informó en un comunicado el Ministerio de Defensa de Rusia.

La nota agregó que “la mayoría de las edificaciones en el campamento de Rukban son asentamientos improvisados y no aptos para la vida de las personas en el invierno, y una parte de los refugiados simplemente tenía que vivir bajo refugios sin techos".

Precisó que las condiciones anti sanitarias reinan en el campamento: los basureros están ubicados cerca de las viviendas, mientras que los depósitos de alimentos y los centros de distribución de comida están ausentes.

Los alimentos y otros productos se intercambian en pequeños mercados controlados por los grupos armados, añadió.

Asimismo, indicó que "Rukban ha perdido su estatus como campo de refugiados, y se ha convertido en una prisión donde los civiles se toman como rehenes por la fuerza”.

La cartera rusa explicó que el campamento de Rukban está rodeado por una valla, además los grupos armados controlados por EE.UU. no dejan salir a nadie, y exigen grandes sumas de dinero en dólares a aquellos que se ven desesperados por abandonar el lugar.

Reiteró que el comando de las fuerzas estadounidenses en el área de al-Tanf donde se ubica el campamento de Rukban impide que los refugiados salgan de allí.