Cerca de un centenar de detenidos fue el saldo de las acciones que se extendieron por varias ciudades, entre estas Santiago de Chile, Arauco, Ercilla, Temuco, Concepción, Viña del Mar y Valparaíso.
En Santiago de Chile las protestas se extendieron hasta la madrugada y derivó en violentos enfrentamientos con la policía, que utilizó carros lanza agua y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
El origen de las acciones fue la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca, de 24 años, durante una acción del Grupo Táctico de Carabineros, más conocido como Comando Jungla.
Ante el hecho una veintena de agrupaciones sociales, políticas y de derechos humanos culparon a la policía de la muerte de Catrillanca y convocaron las manifestaciones.
Según la versión oficial de la policía, el deceso ocurrió cuando un grupo de carabineros persiguió desde la localidad de Ercilla hasta esa comunidad mapuche a los autores del robo de tres autos.
Sin embargo, los dirigentes mapuches desmintieron esa explicación y acusaron a los carabineros de ingresar a sus predios y disparar a mansalva.
Catrillanca era miembro de una de las poblaciones de la llamada zona del conflicto mapuche, marcada por las tensiones generadas por las demandas del pueblo indígena: la devolución de sus tierras, autodeterminación y autonomía.
El Comando Jungla es un grupo especial de la policía chilena -una parte formada en Colombia- para contener acciones de resistencia de grupos mapuches y está desplegado en la zona desde mediados de año por orden del Gobierno de Sebastián Piñera.