En una conversación telefónica sostenida este sábado, el mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, trató con su homólogo ruso, Vladimir Putin, la situación en Siria, y criticó la operación del Ejército sirio contra grupos armados y terroristas en la provincia de Deraa, sita en el sur del país árabe.

Según una fuente presidencial turca, el presidente Erdogan subrayó que "los ataques contra civiles en Daraa son preocupantes y señaló que si el régimen de Damasco ataca igual a Idleb, entonces la esencia del Acuerdo de Astana quedaría completamente destruida”.

Por su parte, Reuters informó que Erdogan alegó que evitar “acontecimientos negativos” en la provincia noroccidental siria de Idleb es clave para alentar a los grupos armados a participar en una nueva cumbre de Astana, prevista para el 30 y 31 de julio.

Por su parte, el Kremlin corroboró la conversación entre los presidentes, e indicó que ambos líderes prestaron atención especial a los pasos conjuntos para arreglar la crisis en Siria con base en las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) y los acuerdos alcanzados en el marco del formato de Astana.