El líder de la Revolución Islámica de Irán, Sayyed Ali Khamenei, confirmó que Teherán ha logrado convertir las amenazas regionales contra el país en oportunidades, y llamó al fortalecimiento de la producción nacional.

En su discurso por el Año Nuevo persa (Noruz) y ante cientos de miles de iraníes, el ayatolah Khamenei
dio a conocer al pueblo los retos más importantes a enfrentar en el nuevo año que recién inicia, y enumeró algunos de los obstáculos que impiden a los iraníes emplear al completo sus capacidades para impulsar el desarrollo.

En alusión a los últimos acontecimientos registrados en el Medio Oriente, resaltó el papel de Irán en facilitar la derrota del grupo terrorista Daesh y aseguró que sin Teherán, no se hubiera materializado la caída de esta banda extremista.

De igual modo, denunció la injerencia de algunos países en los asuntos internos de las naciones de la región y, en este sentido, rememoró que la nación persa consiguió desbaratar los complots ideados por Estados Unidos y el régimen de Israel.

Además, hechó por tierra las declaraciones de EE.UU. y sus aliados que aseguran haber jugado un papel destacado en la derrota de Daesh. Subrayó que Washington y sus secuaces no tienen interés alguno en derrotar a los terroristas, sino que, por el contrario, prefieren tener bajo su control a Daesh y a bandas extremistas de similares características.

Señaló que Estados Unidos no es capaz o no tiene interés en que en el Medio Oriente reinen la paz y la estabilidad y, al respecto, señaló el caso de Afganistán, un país que fue invadido en 2001 por EE.UU. y en el que, en los últimos años, la situación de la seguridad ha empeorado en lugar de experimentar algún tipo de mejoría.

El ayatolah Khamenei afirmó que Irán, frente a la brutal arremetida terrorista, le tendió su mano a los países implicados en la lucha antiterrorista y les ayudó y seguirá ayudándolos, si así lo manifiestan, en sus esfuerzos para hacer frente a los extremistas.

El líder iraní, en un discurso el martes, felicitó el nuevo año persa, y designó ‘Apoyar el producto iraní’ como el lema para tal evento, el cual se convertirá en la base de las políticas de las autoridades de la República Islámica de Irán.

Además alabó a la nación iraní por haber defendido y apoyado los valores de la Revolución Islámica como la libertad, la independencia, la democracia, la autoconfianza y la justicia, entre otros.

Recordó que Irán, por varias décadas antes de la victoria de la Revolución Islámica, estuvo bajo el yugo de potencias hegemónicas, durante las dinastías Qayar y Pahlaví.

También resaltó el éxito de la República Islámica en reducir la desigualdad social.

Por otro lado, ha incidido en la capacidad de los jóvenes iraníes a la hora de facilitar el desarrollo y el progreso del país, mientras que les ha invitado a trabajar con el fin de garantizar un buen futuro para Irán.

Dijo que Irán es uno de los países con más reservas gasíferas y petrolíferas del mundo, sin embargo, pero señaló que el país debe reducir su dependencia del petróleo y aumentar sus exportaciones de materias y bienes no derivados del petróleo y del gas.

Asimismo, el líder iraní urgió a las autoridades del país a recurrir a las capacidades existentes para establecer relaciones económicas con los países vecinos, además de hacer frente al contrabando de bienes.