Movimientos y protestas en las mayorías de los territorios palestinos ocupados
Las fuerzas de ocupación israelíes arrestaron a los líderes de las manifestantes en Belén para detener las protestas, en medio de marchas desde el centro de Ramallah hasta el puesto de control militar en la entrada de Biera. El Ejército israelí desplegó un gran número de sus fuerzas en Cisjordania y aumentó sus amenazas contra los palestinos.
La población autóctona de los territorios ocupados por el régimen de Tel Aviv volvió a expresar su ira este viernes en protestas contra la impopular decisión de la Administración estadounidense de reconocer Al-Quds como capital israelí.
En la ciudad de Beit Lahm (Belén), los manifestantes expresaron su malestar por la medida de Washington, quemaron neumáticos y lanzaron piedras en señal de protesta, mientras los soldados del régimen israelí utilizaban la fuerza para dispersarlos.
Por otro lado, coincidiendo con la llamada de los grupos palestinos a celebrar un sexto viernes de ira, el régimen israelí declaró el estado de emergencia, lo cual resultó en enfrentamientos en la ciudad cisjordana de Nablús.
En la misma jornada, miles de personas asisteron al funeral de un adolescente palestino de 16 años que perdió la vida el jueve tras recibir un impacto de bala en la aldea de Burin, 7 kilómetros al suroeste de Nablús, cuando las fuerzas de ocupación abrieron fuego contra un grupo de manifestantes palestinos.
En el funeral, los palestinos gritaron consignas para expresar su condena de la ocupación israelí y amenzaron con vengar el asesinato.
Los soldados israelíes reprimieron brutalmente las protestas y detuvieron a seis personas en la ciudad, incluyendo 5 miembros de una misma familia palestina.
Por otro lado, la agencia de noticias palestina Wafa informó que las fuerzas sionistas atacaron a los reporteros palestinos.
En la ciudad de Beit Lahm (Belén), los manifestantes expresaron su malestar por la medida de Washington, quemaron neumáticos y lanzaron piedras en señal de protesta, mientras los soldados del régimen israelí utilizaban la fuerza para dispersarlos.
Por otro lado, coincidiendo con la llamada de los grupos palestinos a celebrar un sexto viernes de ira, el régimen israelí declaró el estado de emergencia, lo cual resultó en enfrentamientos en la ciudad cisjordana de Nablús.
En la misma jornada, miles de personas asisteron al funeral de un adolescente palestino de 16 años que perdió la vida el jueve tras recibir un impacto de bala en la aldea de Burin, 7 kilómetros al suroeste de Nablús, cuando las fuerzas de ocupación abrieron fuego contra un grupo de manifestantes palestinos.
En el funeral, los palestinos gritaron consignas para expresar su condena de la ocupación israelí y amenzaron con vengar el asesinato.
Los soldados israelíes reprimieron brutalmente las protestas y detuvieron a seis personas en la ciudad, incluyendo 5 miembros de una misma familia palestina.
Por otro lado, la agencia de noticias palestina Wafa informó que las fuerzas sionistas atacaron a los reporteros palestinos.