Sabih al Masri regresa a Jordania tras ser detenido en Arabia Saudita
El millonario palestino Sabih al Masri, uno de los empresarios más poderosos de Jordania, regresó este martes a Amán tras ser liberado por Arabia Saudita, donde fue detenido la semana pasada, a cambio de una importante suma de dinero, según revelaron fuentes conocedoras del caso.

Al Masri fue arrestado para ser interrogado sobre sus presuntos vínculos con empresarios, políticos y miembros de la familia real saudita, como parte de la campaña anticorrupción puesta en marcha por el príncipe heredero, Mohamed bin Salman.
El propio Al Masri, que ostenta la ciudadanía saudita, dijo el pasado domingo desde su casa en Riad que ha sido tratado con "todo el respeto", sin dar detalles sobre su cautiverio.
Fuentes consultadas por Reuters dijeron que "no hay forma de que haya sido liberado sin algún tipo de acuerdo". "Los sauditas le están diciendo a todo el que tiene dinero que debe pagar", indicaron.
Al Masri es el actual director del Arab Bank, que se creó en Jerusalén en 1930 como una de las mayores instituciones financieras de Medio Oriente y ha logrado resistir a las turbulencias de la región.
El arresto de Al Masri puso nervioso al círculo empresarial de Jordania y los territorios palestinos y, en general, a los magnates árabes que han conseguido parte de su fortuna en Arabia Saudita.
Por su parte, las autoridades de Riad sostienen que la ofensiva contra la corrupción, que se ha saldado con más de 200 detenidos, permitirá repatriar fondos no declarados.
Sin embargo, analistas advierten que se enmarca en la purga orquestada por el príncipe heredero para despejar su ascenso al trono.
El propio Al Masri, que ostenta la ciudadanía saudita, dijo el pasado domingo desde su casa en Riad que ha sido tratado con "todo el respeto", sin dar detalles sobre su cautiverio.
Fuentes consultadas por Reuters dijeron que "no hay forma de que haya sido liberado sin algún tipo de acuerdo". "Los sauditas le están diciendo a todo el que tiene dinero que debe pagar", indicaron.
Al Masri es el actual director del Arab Bank, que se creó en Jerusalén en 1930 como una de las mayores instituciones financieras de Medio Oriente y ha logrado resistir a las turbulencias de la región.
El arresto de Al Masri puso nervioso al círculo empresarial de Jordania y los territorios palestinos y, en general, a los magnates árabes que han conseguido parte de su fortuna en Arabia Saudita.
Por su parte, las autoridades de Riad sostienen que la ofensiva contra la corrupción, que se ha saldado con más de 200 detenidos, permitirá repatriar fondos no declarados.
Sin embargo, analistas advierten que se enmarca en la purga orquestada por el príncipe heredero para despejar su ascenso al trono.