Coalición anti-Daesh mata a nueve civiles en Al-Hasaka y destruye parte de la histórica muralla de Raqqa
La llamada coalición anti-Daesh, liderada por Estados Unidos, atacó nuevamente a la población civil en siria y mató a nueve personas.
Los cazas de la alianza, bajo el pretexto de luchar contra Daesh, lanzaron un ataque contra la aldea de Al-Zayanat, informaron medios locales.
El ataque tuvo lugar contra viviendas civiles de la referida localidad, situada a 15 kilómetros de la ciudad de Al-Shaddadi, en la provincia de Al-Hasaka.
El Gobierno de Damasco continúa reclamado el cese de los ilegítimos ataques de la coalición en su territorio, cuestionando su verdadero objetivo.
Por otro lado, se informó que la coalición destruyó parte de la muralla histórica de Raqqa.
Según reportes del Mando Central de EE.UU. (Centcom), las fuerzas de la coalición, en apoyo el avance de las Fuerzas Democráticas Sirias en la parte más fortificada de Raqqa, abrieron con su fuego dos grietas en la muralla de Rafiqa, que rodea el casco antiguo.
Los agujeros se crearon por medio de una serie de bombardeos aéreos —realizados de manera meticulosa por los cazas de la coalición, según el centro militar estadounidense, para preservar el resto de la muralla—.
“Las partes de la muralla que fueron objeto del ataque eran secciones de 25 metros, lo que ayudará a preservar lo que queda de la muralla, de 2 mil 500 metros”, añadió el organismo.
Asimismo, resaltó que esa operación supondrá una ayuda para que los aliados de la coalición abran una brecha hacia el casco antiguo de Raqqa.
El ataque tuvo lugar contra viviendas civiles de la referida localidad, situada a 15 kilómetros de la ciudad de Al-Shaddadi, en la provincia de Al-Hasaka.
El Gobierno de Damasco continúa reclamado el cese de los ilegítimos ataques de la coalición en su territorio, cuestionando su verdadero objetivo.
Por otro lado, se informó que la coalición destruyó parte de la muralla histórica de Raqqa.
Según reportes del Mando Central de EE.UU. (Centcom), las fuerzas de la coalición, en apoyo el avance de las Fuerzas Democráticas Sirias en la parte más fortificada de Raqqa, abrieron con su fuego dos grietas en la muralla de Rafiqa, que rodea el casco antiguo.
Los agujeros se crearon por medio de una serie de bombardeos aéreos —realizados de manera meticulosa por los cazas de la coalición, según el centro militar estadounidense, para preservar el resto de la muralla—.
“Las partes de la muralla que fueron objeto del ataque eran secciones de 25 metros, lo que ayudará a preservar lo que queda de la muralla, de 2 mil 500 metros”, añadió el organismo.
Asimismo, resaltó que esa operación supondrá una ayuda para que los aliados de la coalición abran una brecha hacia el casco antiguo de Raqqa.