Irak y ONU analizan ofensiva contra Daesh en Mosul
Autoridades de Irak y de la ONU analizaron en Bagdad la marcha de la ofensiva contra Daesh en Mosul, especialmente la necesidad de coordinar mejor los bombardeos aéreos para evitar bajas civiles, informó Prensa Latina.

El presidente del Consejo de Representantes de Irak, Saleem Al-Jubouri, se reunió con el representante del secretario general de la ONU para este país árabe, Jan Kubis, con quien revisó los últimos acontecimientos políticos, de seguridad y militares.
Fuentes parlamentarias indicaron que ambos funcionarios trataron particularmente los bombardeos aéreos que hace una semana causaron la muerte de un centenar de civiles en zonas densamente pobladas de la segunda ciudad de la nación mesopotámica, todavía en poder de Daesh.
Kubis insistió en la necesidad de ser más precisos a la hora de dirigir los ataques aéreos y tomar en cuenta la densidad de población de la urbe, capital de la provincia norte de Nínive.
Por su lado, Al-Jubouri llamó a las organizaciones humanitarias y a la propia ONU a emprender todos los esfuerzos posibles para ayudar a los desplazados como consecuencia de la violencia y proveerles alimentos y asistencia médica en las instalaciones habilitadas para albergarlos.
Varios reportes de la prensa iraquí cuestionaron la verdadera voluntad de la coalición internacional encabezada por Estados Unidos para poner en práctica un plan concreto de asistencia a Bagdad en la previsible era post-Daesh, como se discutió la semana pasada en Washington.
Según comentaristas locales, la Casa Blanca y sus aliados dialogaron del futuro post-Daesh, pero carecen de un plan específico que satisfaga los pedidos del gobierno iraquí de más ayuda económica para garantizar la estabilidad en las áreas donde ya fue derrotada la agrupación terrorista.
Fuentes parlamentarias indicaron que ambos funcionarios trataron particularmente los bombardeos aéreos que hace una semana causaron la muerte de un centenar de civiles en zonas densamente pobladas de la segunda ciudad de la nación mesopotámica, todavía en poder de Daesh.
Kubis insistió en la necesidad de ser más precisos a la hora de dirigir los ataques aéreos y tomar en cuenta la densidad de población de la urbe, capital de la provincia norte de Nínive.
Por su lado, Al-Jubouri llamó a las organizaciones humanitarias y a la propia ONU a emprender todos los esfuerzos posibles para ayudar a los desplazados como consecuencia de la violencia y proveerles alimentos y asistencia médica en las instalaciones habilitadas para albergarlos.
Varios reportes de la prensa iraquí cuestionaron la verdadera voluntad de la coalición internacional encabezada por Estados Unidos para poner en práctica un plan concreto de asistencia a Bagdad en la previsible era post-Daesh, como se discutió la semana pasada en Washington.
Según comentaristas locales, la Casa Blanca y sus aliados dialogaron del futuro post-Daesh, pero carecen de un plan específico que satisfaga los pedidos del gobierno iraquí de más ayuda económica para garantizar la estabilidad en las áreas donde ya fue derrotada la agrupación terrorista.