Pospuesta votación sobre ley sanitaria en Estados Unidos
Los esfuerzos de Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, no han servido para convecer a los republicanos sobre el nuevo proyecto de ley sanitaria que derogaría el Obamacare.

Donald Trump, presidente de EE.UU. no ha podido convencer a los republicanos para votar la aprobación del nuevo plan de salud que derogaría la ley sanitaria del expresidente estadounidense, Barack Obama. Ante la falta de apoyo de la propia bancada, ha sido pospesta la votación.
Fuentes de la Casa Blanca aseguran que el viernes en la mañana podría producirse el voto, sin embargo el liderazgo republicano, encargado de establecer los horarios de la misma, aún no se ha pronunciado.
Donald Trump sostuvo una reunión urgente con el grupo ultraderechista Freedom Caucus para tratar de convencerlo de votar a favor del texto pero el resultado ha sido nulo.
Sean Spicer, portavoz de la Casa Blanca, aseguró que la reunión del mandatario constituyó "un paso positivo" con miras a la aprobación del proyecto de reforma sanitaria.
Spicer también reconoció que "no hay un plan B" y que "es tiempo de que la Cámara de Representantes vote a favor del plan alternativo a Obamacare que avalan Trump y los líderes republicanos del Congreso".
La rueda de prensa prevista para el jueves, con Paul Ryan, presidente de la Cámara de Representantes, fue pospuesta también, tras la verificación de votos no ascendentes a los necesarios 216 que lograrían la aprobación.
Al menos 22 republicanos deben votar contra el Obamacare y este jueves la cifra de detractores superaba la veintena, según los cálculos de medios y fuentes legislativas.
Fuentes de la Casa Blanca aseguran que el viernes en la mañana podría producirse el voto, sin embargo el liderazgo republicano, encargado de establecer los horarios de la misma, aún no se ha pronunciado.
Donald Trump sostuvo una reunión urgente con el grupo ultraderechista Freedom Caucus para tratar de convencerlo de votar a favor del texto pero el resultado ha sido nulo.
Sean Spicer, portavoz de la Casa Blanca, aseguró que la reunión del mandatario constituyó "un paso positivo" con miras a la aprobación del proyecto de reforma sanitaria.
Spicer también reconoció que "no hay un plan B" y que "es tiempo de que la Cámara de Representantes vote a favor del plan alternativo a Obamacare que avalan Trump y los líderes republicanos del Congreso".
La rueda de prensa prevista para el jueves, con Paul Ryan, presidente de la Cámara de Representantes, fue pospuesta también, tras la verificación de votos no ascendentes a los necesarios 216 que lograrían la aprobación.
Al menos 22 republicanos deben votar contra el Obamacare y este jueves la cifra de detractores superaba la veintena, según los cálculos de medios y fuentes legislativas.