Espero que la historia me considere un hombre que protegió a su país del terrorismo
El presidente Bashar al Assad afirmó que el pueblo sirio es el que decide y determina quién será su presidente y cuando tendrá que abandonar el poder.
En entrevista concedida a la cadena norteamericana NBC News, publicada este jueves, el presidente señaló que para él la guerra no es la vía para permanecer en el cargo, sino para la recuperación de Siria. No es una guerra para la supervivencia del presidente sino para proteger a Siria, precisó.
Al-Assad se negó a ser descrito como "brutal dictador" y espera que la historia lo considere un hombre que estaba protegiendo al país del terrorismo y para salvar su soberanía. Cuando se protege a un país de terroristas, eso no es ser brutal, sino patriota.
Indicó que los funcionarios estadounidenses no tienen buenas intenciones hacia Siria. El problema consiste -dijo- en que ellos dicen una cosa y ocultan sus intenciones detrás de las máscaras y se mueven en una dirección diferente.
Subrayó que Estados Unidos no tiene una voluntad verdadera y real para combatir al terrorismo, sino que quiere administrar a los grupos terroristas y usarlos como carta para derrocar al gobierno en Siria, tal como lo hicieron en Afganistán.
Expresó que el grupo terrorista “Estado Islámico” fue creado en Irak en 2006 durante la presencia de los estadounidenses en ese país, y ellos pudieron bombardearlo pero no lo hicieron.
Al referirse a la política rusa, expresó que no se basa en contratos de negocios sino en valores, por lo que no hay ningún logro común entre ellos y los estadounidenses debido a la diferencia en los principios.
Aclaró que las políticas de Estados Unidos se basan en tratos de negocios sin importarle los valores.
Asimismo, agradeció a todos los que estuvieron al lado de Siria, a los rusos y a los iraníes, incluso los chinos estuvieron a nuestro lado, pero cada uno a su manera, ya sea política, militar o económicamente.
Al Assad describió su relación con su homólogo ruso de muy franca, honesta y transparente, y basado en el respeto mutuo.
Sobre las sospechas de que Rusia podría estar trabajando en coordinación con Estados Unidos para llegar a un acuerdo que pueda representar malas noticias para el gobierno sirio, el presidente dijo que de vez en cuando aparecen noticias de que los rusos son los que deciden qué va a pasar en Siria, pero eso no es verdad porque las mismas autoridades rusas son los que han dicho muy claramente y en varias ocasiones que el futuro sirio lo decide el pueblo sirio.
Sobre los ataques aéreos estadounidenses contra el Estado Islámico, el mandatario sirio dijo que son ilegales, ineficaces y tienen un efecto contraproducente.
Al-Assad se negó a ser descrito como "brutal dictador" y espera que la historia lo considere un hombre que estaba protegiendo al país del terrorismo y para salvar su soberanía. Cuando se protege a un país de terroristas, eso no es ser brutal, sino patriota.
Indicó que los funcionarios estadounidenses no tienen buenas intenciones hacia Siria. El problema consiste -dijo- en que ellos dicen una cosa y ocultan sus intenciones detrás de las máscaras y se mueven en una dirección diferente.
Subrayó que Estados Unidos no tiene una voluntad verdadera y real para combatir al terrorismo, sino que quiere administrar a los grupos terroristas y usarlos como carta para derrocar al gobierno en Siria, tal como lo hicieron en Afganistán.
Expresó que el grupo terrorista “Estado Islámico” fue creado en Irak en 2006 durante la presencia de los estadounidenses en ese país, y ellos pudieron bombardearlo pero no lo hicieron.
Al referirse a la política rusa, expresó que no se basa en contratos de negocios sino en valores, por lo que no hay ningún logro común entre ellos y los estadounidenses debido a la diferencia en los principios.
Aclaró que las políticas de Estados Unidos se basan en tratos de negocios sin importarle los valores.
Asimismo, agradeció a todos los que estuvieron al lado de Siria, a los rusos y a los iraníes, incluso los chinos estuvieron a nuestro lado, pero cada uno a su manera, ya sea política, militar o económicamente.
Al Assad describió su relación con su homólogo ruso de muy franca, honesta y transparente, y basado en el respeto mutuo.
Sobre las sospechas de que Rusia podría estar trabajando en coordinación con Estados Unidos para llegar a un acuerdo que pueda representar malas noticias para el gobierno sirio, el presidente dijo que de vez en cuando aparecen noticias de que los rusos son los que deciden qué va a pasar en Siria, pero eso no es verdad porque las mismas autoridades rusas son los que han dicho muy claramente y en varias ocasiones que el futuro sirio lo decide el pueblo sirio.
Sobre los ataques aéreos estadounidenses contra el Estado Islámico, el mandatario sirio dijo que son ilegales, ineficaces y tienen un efecto contraproducente.
Agregó que al contrario de los norteamericanos, los rusos han sido invitados legal y oficialmente por el gobierno sirio, y es derecho de cualquier gobierno que llame a cualquier Estado para ayudarle en cualquier caso. Por lo tanto, son legales en Siria, mientras que la presencia de los estadounidenses y de todos sus aliados no es legítima.
Al comentar sobre los avances militares en el terreno, El presidente de la nación levantina señaló que el Ejército Árabe Sirio ha logrado significativos avances y eso es el objetivo de cualquier ejército o de cualquier gobierno.
Ganar la guerra depende en varios factores, señaló Al Assad. Para él el más importante es hasta cuándo los patrocinadores de los terroristas, especialmente Turquía, Qatar y Arabia Saudita con el respaldo de algunos países occidentales, incluyendo los Estados Unidos, seguirán apoyando a esos terroristas. Destacó que todo terminaría en pocos meses si esos países dejan de apoyar a los grupos terroristas en Siria.
Argumentó que todo depende del volumen de apoyo que reciben los terroristas y del volumen de reclutamiento llevado a cabo por Turquía con el dinero saudita, pues ambos gobiernos persiguen prolongar la guerra.
Subrayó que si el Ejército sirio logra derrotar al Estado Islámico eso sería una ayuda al mundo entero porque los terroristas que vienen a Siria desde más de cien países en el mundo, si no son vencidos allí volverán y atacarán a los países de donde vinieron.
Al referirse a los últimos presidentes de Estados Unidos dijo que estos no tenían suficiente experiencia en la política exterior, lo que se ha erigido en un problema para ese país.
A una pregunta sobre si le preocupa que el candidato presidencial Trump no tenga ninguna experiencia en política exterior, Al Assad dijo que ni Obama ni tenía esa experiencia y eso constituye en sí mismo un problema para Estados Unidos.
"Hay que buscar a un hombre de Estado que tenga experiencia real en la política desde hace años, y no a un hombre que ocupó varios puestos en el Congreso durante algunos años o fue un ministro de exteriores”, precisó.
Al comentar sobre los avances militares en el terreno, El presidente de la nación levantina señaló que el Ejército Árabe Sirio ha logrado significativos avances y eso es el objetivo de cualquier ejército o de cualquier gobierno.
Ganar la guerra depende en varios factores, señaló Al Assad. Para él el más importante es hasta cuándo los patrocinadores de los terroristas, especialmente Turquía, Qatar y Arabia Saudita con el respaldo de algunos países occidentales, incluyendo los Estados Unidos, seguirán apoyando a esos terroristas. Destacó que todo terminaría en pocos meses si esos países dejan de apoyar a los grupos terroristas en Siria.
Argumentó que todo depende del volumen de apoyo que reciben los terroristas y del volumen de reclutamiento llevado a cabo por Turquía con el dinero saudita, pues ambos gobiernos persiguen prolongar la guerra.
Subrayó que si el Ejército sirio logra derrotar al Estado Islámico eso sería una ayuda al mundo entero porque los terroristas que vienen a Siria desde más de cien países en el mundo, si no son vencidos allí volverán y atacarán a los países de donde vinieron.
Al referirse a los últimos presidentes de Estados Unidos dijo que estos no tenían suficiente experiencia en la política exterior, lo que se ha erigido en un problema para ese país.
A una pregunta sobre si le preocupa que el candidato presidencial Trump no tenga ninguna experiencia en política exterior, Al Assad dijo que ni Obama ni tenía esa experiencia y eso constituye en sí mismo un problema para Estados Unidos.
"Hay que buscar a un hombre de Estado que tenga experiencia real en la política desde hace años, y no a un hombre que ocupó varios puestos en el Congreso durante algunos años o fue un ministro de exteriores”, precisó.