Thierry Meyssan: Clinton en la Casa Blanca agravaría crisis siria
Un triunfo de Hillary Clinton en las próximas elecciones en Estados Unidos podría constituir un impulso a la agresión extranjera contra Siria, señaló en Damasco Thierry Meyssan, presidente-fundador de la Red Voltaire.

A juicio del destacado periodista y académico francés las posiciones neoconservadoras en política exterior de Clinton impactarían en el desarrollo de los conflictos en todo el Medio Oriente.
Recordó que ex secretaria de Estado desempeñó un papel primordial en la llamada primavera árabe, por lo tanto es posible que esa política continúe de asumir la jefatura de la Casa Blanca.
Este comportamiento agravaría la situación regional, la agresividad contra el Gobierno del presidente Bashar al Assad, un incremento de la acción militar a favor de los grupos antigubernamentales que operan en suelo sirio y por tanto más muertos en el futuro previsible.
Sobre Donald Trump, Meyssan señaló que existe incertidumbre sobre sus posibles proyecciones en política exterior, mucho más en cuanto al Medio Oriente, porque todo parece indicar que ni él mismo sabe lo que se propone en este sentido.
De acuerdo con Meyssan, el problema más importante no es si triunfa Clinton o Trump en las presidenciales de este año, sino saber si Estados Unidos es capaz de reconocer que perdió el primer lugar mundial en el ámbito de la guerra convencional y otros aspectos de carácter estratégico frente a Rusia.
Algo similar les ocurre con el avance económico, comercial y militar de la República Popular China, que a juicio del experto desplazó a Washington como potencia preponderante, a pesar de que mantiene su condición hegemónica en muchos otros índices.
Otro elemento a observar en este proceso -precisó- es cómo el próximo mandatario estadounidense enfrentará el fracaso de la administración de Barack Obama de poner en práctica el llamado giro Asiático de su estrategia en política exterior y presencia militar.
Meyssan apuntó que la propia complicación del conflicto en el Medio Oriente pudiera echar por tierra la proyección de Estados Unidos de reforzar su presencia militar y dominio económico en Asia, y este es otro desafío que enfrentará quien triunfe en las presidenciales del 8 de noviembre.
Recordó que ex secretaria de Estado desempeñó un papel primordial en la llamada primavera árabe, por lo tanto es posible que esa política continúe de asumir la jefatura de la Casa Blanca.
Este comportamiento agravaría la situación regional, la agresividad contra el Gobierno del presidente Bashar al Assad, un incremento de la acción militar a favor de los grupos antigubernamentales que operan en suelo sirio y por tanto más muertos en el futuro previsible.
Sobre Donald Trump, Meyssan señaló que existe incertidumbre sobre sus posibles proyecciones en política exterior, mucho más en cuanto al Medio Oriente, porque todo parece indicar que ni él mismo sabe lo que se propone en este sentido.
De acuerdo con Meyssan, el problema más importante no es si triunfa Clinton o Trump en las presidenciales de este año, sino saber si Estados Unidos es capaz de reconocer que perdió el primer lugar mundial en el ámbito de la guerra convencional y otros aspectos de carácter estratégico frente a Rusia.
Algo similar les ocurre con el avance económico, comercial y militar de la República Popular China, que a juicio del experto desplazó a Washington como potencia preponderante, a pesar de que mantiene su condición hegemónica en muchos otros índices.
Otro elemento a observar en este proceso -precisó- es cómo el próximo mandatario estadounidense enfrentará el fracaso de la administración de Barack Obama de poner en práctica el llamado giro Asiático de su estrategia en política exterior y presencia militar.
Meyssan apuntó que la propia complicación del conflicto en el Medio Oriente pudiera echar por tierra la proyección de Estados Unidos de reforzar su presencia militar y dominio económico en Asia, y este es otro desafío que enfrentará quien triunfe en las presidenciales del 8 de noviembre.