Pérez Esquivel denuncia manipulación de Macri sobre asuntos de derechos humanos
El Premio Nobel de la Paz 1980, el argentino Adolfo Pérez Esquivel, criticó la utilización de los derechos humanos que hace el presidente Mauricio Macri, mientras su gobierno viola determinadas libertades individuales y colectivas.
Pérez Esquivel manifestó sentirse irritado cuando Macri se refiere a los derechos humanos de otros países latinoamericanos, y no habla de lo que ocurre en su país.
En entrevista concedida al diario español El País, el destacado activista exigió una revisión del protocolo de seguridad en la nación suramericana, porque -en su opinión- no se puede reprimir con balas de goma a menores de edad por el simple hecho de manifestarse.
Alegó que la policía de su país sigue con los mismos mecanismos del régimen de facto. Añadió que se transformaron de fuerzas de prevención en represoras. Todo lo quieren resolver por medio de la tortura y eso es nefasto, apuntó.
Sobre estos 40 años de lucha en defensa de los derechos de los argentinos, Pérez Esquivel reconoció que fueron y son difíciles hasta el día de hoy, debido a que muchos tratan de apropiarse de esos derechos con intereses políticos.
Indicó que se habla únicamente de lo sucedido con las personas, pero hay complicidad de grandes empresas con el golpe y de algunos sectores de la Iglesia Católica.
Subrayó que los militares por sí solos no dan un golpe de Estado. Esto es lo que se está tratando de abrir porque la única forma es preservar la memoria colectiva del pueblo, resaltó.
Exteriorizó que en el presente se utilizan los golpes blandos, a través de los poderes económico y judicial.
Respecto a la actual visita a Buenos Aires del presidente estadounidense, Barack Obama, el Nobel de la Paz espera que admita el cuestionado papel de Washington en la dictadura argentina, pero también en las otras que golpearon a América Latina.
En entrevista concedida al diario español El País, el destacado activista exigió una revisión del protocolo de seguridad en la nación suramericana, porque -en su opinión- no se puede reprimir con balas de goma a menores de edad por el simple hecho de manifestarse.
Alegó que la policía de su país sigue con los mismos mecanismos del régimen de facto. Añadió que se transformaron de fuerzas de prevención en represoras. Todo lo quieren resolver por medio de la tortura y eso es nefasto, apuntó.
Sobre estos 40 años de lucha en defensa de los derechos de los argentinos, Pérez Esquivel reconoció que fueron y son difíciles hasta el día de hoy, debido a que muchos tratan de apropiarse de esos derechos con intereses políticos.
Indicó que se habla únicamente de lo sucedido con las personas, pero hay complicidad de grandes empresas con el golpe y de algunos sectores de la Iglesia Católica.
Subrayó que los militares por sí solos no dan un golpe de Estado. Esto es lo que se está tratando de abrir porque la única forma es preservar la memoria colectiva del pueblo, resaltó.
Exteriorizó que en el presente se utilizan los golpes blandos, a través de los poderes económico y judicial.
Respecto a la actual visita a Buenos Aires del presidente estadounidense, Barack Obama, el Nobel de la Paz espera que admita el cuestionado papel de Washington en la dictadura argentina, pero también en las otras que golpearon a América Latina.