Rechaza Premio Nobel de la Paz próxima visita de Obama a Argentina
El premio Nobel de la Paz en 1980, el argentino Adolfo Pérez Esquivel, criticó el próximo viaje a Argentina del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por coincidir con el aniversario 40 de un golpe de Estado.

En carta abierta dirigida a Obama, Pérez Esquivel expresó: "Es importante que sepas que no vienes a Argentina en cualquier momento. En 1976, mientras tú tenías tan sólo 14 años y tu país festejaba dos siglos de su independencia, nosotros comenzábamos el período más trágico de nuestra historia".
Señaló que Obama será bienvenido en Argentina siempre que reconozca su complicidad en los golpes de Estado sufridos en la región, tanto en el pasado como en actualidad. Precisó que un análisis profundo de la situación evidencia que Estados Unidos fue responsable de los golpes de Estado en América Latina.
"Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad", citó el activista humanitario argentino a Simón Bolívar para advertir a Obama, en el caso de que pretenda avalar los ilegítimos reclamos de los fondos financieros o recomendar una intervención militar en el país suramericano.
Estimó que si el jefe de Estado estadounidense no anuncia reparaciones ni evita nuevos padecimientos, el pueblo argentino podría considerar la visita de una provocación hacia su identidad nacional.
Por su parte, organismos argentinos de derechos humanos también consideran la visita del mandatario estadounidense como un viaje inoportuno, puesto que a su parecer, la coincidencia de la visita con el aniversario del golpe de Estado recuerda las prácticas de Washington contra las democracias en la región a lo largo de la historia.
El 23 y 24 del mes de marzo en curso —día del planeado viaje de Obama—, los organismos de derechos humanos argentinos llevarán a cabo marchas y actos en recuerdo de la fecha en la que se derrocó a la presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón y comenzó el último Gobierno militar en su país.
Según Wikileaks, Washington apoyó firmemente la dictadura militar que se instauró en aquel entonces en Argentina, a la que consideraba la mejor opción ante el clima de incertidumbre que amenazaba sus intereses en el país.
Pese al visto bueno del Ejecutivo argentino a la visita, la asociación humanitaria argentina Madres de Plaza de Mayo tildó la iniciativa de provocación.
Señaló que Obama será bienvenido en Argentina siempre que reconozca su complicidad en los golpes de Estado sufridos en la región, tanto en el pasado como en actualidad. Precisó que un análisis profundo de la situación evidencia que Estados Unidos fue responsable de los golpes de Estado en América Latina.
"Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad", citó el activista humanitario argentino a Simón Bolívar para advertir a Obama, en el caso de que pretenda avalar los ilegítimos reclamos de los fondos financieros o recomendar una intervención militar en el país suramericano.
Estimó que si el jefe de Estado estadounidense no anuncia reparaciones ni evita nuevos padecimientos, el pueblo argentino podría considerar la visita de una provocación hacia su identidad nacional.
Por su parte, organismos argentinos de derechos humanos también consideran la visita del mandatario estadounidense como un viaje inoportuno, puesto que a su parecer, la coincidencia de la visita con el aniversario del golpe de Estado recuerda las prácticas de Washington contra las democracias en la región a lo largo de la historia.
El 23 y 24 del mes de marzo en curso —día del planeado viaje de Obama—, los organismos de derechos humanos argentinos llevarán a cabo marchas y actos en recuerdo de la fecha en la que se derrocó a la presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón y comenzó el último Gobierno militar en su país.
Según Wikileaks, Washington apoyó firmemente la dictadura militar que se instauró en aquel entonces en Argentina, a la que consideraba la mejor opción ante el clima de incertidumbre que amenazaba sus intereses en el país.
Pese al visto bueno del Ejecutivo argentino a la visita, la asociación humanitaria argentina Madres de Plaza de Mayo tildó la iniciativa de provocación.