FIFA: Blatter obligado a dimitir, Palestina descarta resolución contra Israel

Haga lo que haga, sigue sin gustar y el paso al costado se antoja largo y dilatorio: la FIFA con Joseph Blatter de timonel, a la deriva y por seis meses más, precisa un despacho de Prensa Latina (PL) al adentrarse en el análisis del escándalo que acontece en la institución que rige los destinos del fútbol a nivel internacional.

Para algunos se trata de un anzuelo con carnada envenenada, otros apuestan a lo convencional: presiones al interior de la FIFA y externas obligaron a Blatter a dimitir. No es, en cualquier caso, una salida inmediata ni definitiva. Tampoco se lee el vocablo clásico de irrevocable. Tiró la toalla pero con la idea de perpetuarse unos meses más y hasta erigirse el salvador del embrollo de la FIFA, argumenta la agencia.

Hay quienes advierten una cortina de humo o tal vez maniobra de distracción, pero la pregunta sin respuesta hoy es ¿con qué objetivo? Lo cierto es -indica PL- que la mala hora del fútbol anda desde hace una semana en la búsqueda de una salida honorable ante el escándalo de lavado de dinero, corrupción y sobornos que ensombrece al deporte de las multitudes.
El diario The New York Times acusó a Jeróme Vlacke, secretario general de la FIFA, por supuestamente haber transferido 10 millones de dólares a cuentas gestionadas por el ex vicepresidente de la entidad Jack Warner, uno de los principales encartados en el escándalo que sacudió a la poderosa maquinaria del fútbol, cuando el pasado 27 de mayo la Fiscal General de Estados Unidos, Loretta Lynch, y el FBI enviaron a prisión a 14 implicados.
El diario The New York Times acusó a Jeróme Vlacke, secretario general de la FIFA, por supuestamente haber transferido 10 millones de dólares a cuentas gestionadas por el ex vicepresidente de la entidad Jack Warner, uno de los principales encartados en el escándalo que sacudió a la poderosa maquinaria del fútbol, cuando el pasado 27 de mayo la Fiscal General de Estados Unidos, Loretta Lynch, y el FBI enviaron a prisión a 14 implicados.
Analistas internacionales señalan que Blatter optó por el camino del pragmatismo a condición de terminar ileso en este bochornoso episodio. Seis meses es un tiempo prudencial para poner orden y colocar alfombra roja a su sucesor. Todo indica -explica Prensa Latina- que las ramificaciones son enormes y van a salpicar a funcionarios y países. Ello explica el escozor de Chile, donde la llegada de la Copa América es motivo de jolgorio para los hinchas y de preocupación para los dirigentes.

Ya en Chile comenzaron a cerrarle el cerco a Sergio Jadue, titular de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), incluido en una denuncia, junto a los otros nueve timoneles del fútbol sudamericano, por recibir dinero de manera irregular. En su defensa, Jadue alegó que no existen motivos para renunciar ni para estar intranquilos, "estamos afectados en lo personal y familiar, pero con la conciencia tranquila. No hay ningún tipo de irregularidades (...)", apostilló.
Por su parte, Blatter dijo: "Aunque los miembros de la FIFA me reeligieron presidente, parece ser que no fui apoyado por todo el mundo del fútbol (...) convocaré un congreso extraordinario y pondré a disposición mi cargo, que va a ser cubierto lo más rápido posible".
De todas formas, sustenta Prensa Latina, en menos de una semana ya se ha visto como todo puede cambiar en un pestañazo. Ni el tiempo de Blatter es certero, y mucho menos el de Jadue.
Por su parte, Blatter dijo: "Aunque los miembros de la FIFA me reeligieron presidente, parece ser que no fui apoyado por todo el mundo del fútbol (...) convocaré un congreso extraordinario y pondré a disposición mi cargo, que va a ser cubierto lo más rápido posible".
De todas formas, sustenta Prensa Latina, en menos de una semana ya se ha visto como todo puede cambiar en un pestañazo. Ni el tiempo de Blatter es certero, y mucho menos el de Jadue.

En medio de todo lo que rodea a este escándalo, trascendió en Berna, capital de Suiza, que Jibril Al Rajoub, presidente de la Federación palestina de la disciplina, descartó presentar una resolución para suspender a Israel de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), que pretendía someter a votación en el 65 Congreso de la organización. La Federación palestina de fútbol acusa a su homóloga israelí de ser cómplice de sus autoridades políticas en la restricción a los futbolistas palestinos, quienes tienen que enfrentarse a los numerosos puntos de control en Cisjordania y no pueden desplazarse libremente entre esa región y la Franja de Gaza. Además colabora en la tolerancia del racismo antiárabe y reconocer a clubes que operan en colonias en territorios ocupados.

"Muchos presidentes de federaciones de Asia, de África, de Sudamérica, de Norteamérica, Europa, muchos me han dicho que no querían sentar un precedente de tener que tratar el tema de una suspensión", añadió Al Rajoub. La decisión palestina de no llevar el asunto a votación fue recibida con un aplauso por la mayoría de asistentes al Congreso.