Bolivia festeja solsticio de verano austral con ceremonias ancestrales
Los pueblos celebran la "Illa" e "Ispalla" en torno a la fiesta de Illapacha de los Andes, con la finalidad de recordar la primera siembra del año.
Bolivia expresó desde la localidad turística y patrimonial de Tiwanaku una propuesta en defensa de la Pachamama (Madre Tierra) para celebrar el solsticio de verano austral en los Andes.
Decenas de "amautas" (sabios aimaras), "mama tallas" (mujeres guías espirituales), "kallawayas" (médicos tradicionales), autoridades nacionales y dirigentes indígenas viajaron hasta la población de Tiwanaku, a 71 kilómetros al suroeste de La Paz, para dar inicio al festejo.
El presidente boliviano, Luis Arce, y el vicepresidente, David Choquehuanca, llegaron al sitio arqueológico tras los primeros rayos de Sol y depositaron una ofrenda a las deidades, como señala la tradición.
"La Pachamama nos dice (en el solsticio) que nos va a bendecir con lluvias y que vamos a producir el alimento para la población (por eso es) importantísimo llegar hasta Tiahuanaco", expresó el mandatario.
Cada 21 de diciembre los pueblos originarios celebran la fiesta de Illapacha de los Andes, con el objetivo de recordar la primera siembra del año.
Desde esta cosmovisión toda forma de existencia tiene su “Illa” (origen animal) y su “Ispalla” (vegetal), de ahí la importancia de conmemorar la supervivencia de las especies.