El profesor clínico en la Universidad de Hong Kong, John Nicholls, quien es parte del equipo que investiga el coronavirus, considera que el hecho de que una persona dé negativo para coronavirus no significa que no lo contraiga en el futuro.

Es posible que una persona tenga un resultado negativo y luego deba realizarse un examen nuevamente más tarde.

“Será una pérdida continua de los recursos y la mano de obra para tratar de revertir estas pruebas”, dijo.

Virus en hospitales: si la propagación del coronavirus es similar al brote mortal del SARS de 2003, Nicholls dijo que podría diseminarse “extensamente” dentro de los hospitales.

Si los médicos no descontaminan instrumentos o equipos médicos, incluso algo tan simple como un estetoscopio, esa es una forma en que el virus podría propagarse.

No todos las personas que mueren durante un brote están infectadas con la enfermedad.

Durante brotes como estos, los hospitales a menudo ya no tenían la capacidad de atender a pacientes con enfermedades no relacionadas.

Durante el SARS, los hospitales de Hong Kong suspendieron temporalmente las cirugías electivas porque los médicos estaban demasiado ocupados.

Esto significa que hay una “mortalidad oculta” de las personas que se perdieron sus cirugías o citas, dijo Nicholls.