La economía rusa muestra signos de resistencia, según Bloomberg
Las sanciones occidentales están fracasando en la contención de la economía rusa.
Los pronósticos económicos occidentales no preveían que la economía rusa diera señales de mejora con las numerosas sanciones impuestas por la UE y Estados Unidos, pero Rusia ha conseguido evitar el colapso de su moneda y sigue beneficiándose de la subida de los precios de los hidrocarburos.
Su intención era "castigar a Rusia". Se congelaron los activos y se castigó a las empresas. Pero fracasaron", dijo el Presidente ruso Vladimir Putin el viernes 17 de junio durante el Foro Económico de San Petersburgo, considerado en su día como un símbolo de apertura de las relaciones comerciales con Occidente.
Desde el inicio de la guerra, el 24 de febrero de 2022, Estados Unidos y la UE han multiplicado las medidas punitivas para aislar a Rusia, apuntando a su sistema bancario, congelando los activos de sus dirigentes y sus industrias.
Reconociendo ciertas dificultades, en particular en la cuestión de la inflación, que alcanzó un máximo del 17,8 por ciento en mayo, Vladimir Putin afirma que la implicación de las empresas y las autoridades ha permitido hoy "estabilizar la situación financiera y la economía" del país. En Occidente, sin embargo, muchos observadores afirman que lo peor está por llegar para Moscú.
A principios de marzo, una semana después del inicio de la guerra de Rusia con Ucrania, el rublo había caído a su mínimo histórico frente al dólar y el euro, como consecuencia del anuncio de las primeras sanciones occidentales, en particular, la congelación de las reservas del Banco Central ruso en el extranjero.
En caso de crisis, el dinero que se tiene en divisas puede ser utilizado por un país para impulsar el valor de su propia moneda, algo que Estados Unidos y Europa querían evitar en el caso de Rusia. Pero el Banco Central ruso consiguió contrarrestar esta medida subiendo masivamente sus tipos de interés hasta el 20 por ciento e imponiendo drásticos controles de capital a las empresas y a sus ciudadanos.
Desde entonces, el precio del rublo ha subido mucho, hasta el punto de alcanzar, el lunes 20 de junio, su nivel más alto en casi siete años frente al dólar en la Bolsa de Moscú (55,44 rublos por un dólar).
Otro factor clave que explica la subida del rublo es la venta de hidrocarburos, que por sí sola constituye más del 60 por ciento de las exportaciones del país.
Obligada por las sanciones a reducir drásticamente sus volúmenes de importación, Rusia siguió vendiendo masivamente su petróleo y gas para la exportación, lo que "contribuyó a la demanda de rublos" en el mercado internacional, afirma el economista Julien Vercueil.
"No estamos en el nivel de tensión que habíamos supuesto para 2022", dijo el economista de Rosbank Evgeny Koshelev a las fuentes. "Deberíamos esperar una mejor tendencia porque tanto la política presupuestaria como la monetaria son globalmente estimulantes".