Política de Trump de máxima presión sobre Irán es una obsesión, afirma exanalista de la CIA
Esta declarada política de Washington ha encontrado apoyo solo de (Israel), consciente de que cualquier confrontación directa con la nación persa será costosa y que si algún miembro de la OTAN se suma en este respaldo fallará, según un artículo publicado en el diario digital Salon.
La política del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de "máxima presión" sobre Irán es más una obsesión que una estrategia, afirma el exanalista de la CIA Paul Pillar.
Esta declarada política de Washington ha encontrado apoyo solo de (Israel), consciente de que cualquier confrontación directa con la nación persa será costosa y que si algún miembro de la OTAN se suma en este respaldo fallará, según un artículo publicado en el diario digital Salon.
El bombardeo del lunes, en las afueras de Bagdad, arrojan luz sobre esa cuestión, precisa el material periodístico.
Expertos iraquíes culpan a (Israel) por el ataque, alegando que es consecuencia de dos agresiones ocurridas a principios de este mes contra instalaciones de las milicias apoyadas por Irán en el país árabe.
Mientras un informe de la prensa sionista asegura que el régimen de Tel Aviv ejecutó la acción con aviones F-35 fabricados por Estados Unidos.
En el propio artículo, se especifica que el secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, está presionando desde enero al Gobierno iraquí para que ordene la disolución de las Unidades de Movilización Popular, apoyadas por Irán.
Recuerda el texto que las PMUs, como se les conoce, son las milicias chiítas que lideraron una exitosa lucha para expulsar a Daesh del oeste de Irak en 2017.
Aunque las aclamaban por su papel en la lucha contra Daesh, su posterior expansión en la política nacional no lo fue. El ayatolá Ali Sistani, líder religioso de la nación, bendijo la guerra contra la organización terrorista, pero se opuso abiertamente a su lista electoral en 2018.
No obstante, la alianza política de las PMU –llamada Fateh-, terminó en segundo lugar en las elecciones parlamentarias del pasado año y ayudó a seleccionar al primer ministro, Adel Abdul-Mahdi.
De acuerdo con informes de prensa iraníes, Pompeo dejó claro en una reunión con Abdul-Mahdi en enero que Washington no reaccionaría a los ataques israelíes contra las PMU.
Agregó el material que gracias a la política de Trump, los incentivos para que “Irak se ponga del lado de Irán están creciendo”.
En ese sentido, destacó que cuando (Israel) anunció la semana pasada que se uniría a una coalición de Estados Unidos para proteger la navegación en el Golfo, el gobierno de Bagdad rechazó la idea.
El ministro de Asuntos Exteriores, Mohammed Ali al-Hakim, advirtió que Irak se opone a "cualquier participación de las fuerzas de la entidad sionista en una fuerza militar para asegurar la navegación de los barcos en el golfo Pérsico".
Señaló Al-Hakim que su país "trabajará para reducir las tensiones en nuestra región a través de negociaciones pacíficas".
La presencia de fuerzas occidentales allí- subrayó- solo aumentaría las tensiones.
Abundó el artículo que la alianza de Estados Unidos con (Israel) tiene un alto precio político, el cual, al parecer, Trump está dispuesto a pagar.
Afirmó que los ataques aéreos israelíes continuarán y servirán para aislar a Washington de sus aliados iraquíes y a su vez hacen más vulnerables a las más de cinco mil 200 tropas estadounidenses que quedan en ese territorio.
En resumen –concluyó el artículo-, los ataques israelíes aumentan las posibilidades de que cualquier eventual guerra entre Estados Unidos e Irán se libre en Irak, donde la intervención de los militares del Pentágono fue un desastre hace 15 años.
LE PUEDE INTERESAR