Ayad Loumi, miembro de la campaña electoral de Nabil Karoui, denunció presiones sobre los votantes tunecinos para que no respaldaran a ese candidato.

"La Comisión Electoral Suprema evitó el fraude a pesar de las coacciones, pero fue presionada para excluir a Karoui”, afirmó Loumi.

Dijo que "los ciudadanos en la ciudad de Beja fueron amenazados para que no votaran por su aspirante a la presidencia".

"No nos sorprendieron los resultados debido a la presencia del Karoui en la prisión y la represión de su campaña. El poder judicial respondió a la corrupción de la autoridad política al arrestar a Karoui'', añadió.

Al exigir la liberación de Karoui, el integrante el integrante de su campaña consideró que la revolución no cambió las ideas, "sino que reemplazó a los corruptos por nuevos corruptos".

Finalmente apuntó que no se puede imaginar ningún progreso democrático sin partidos políticos.

Por su parte, el candidato Kais Said expresó que están ante un nuevo capítulo en la historia de Túnez, "y debemos trabajar para izar la bandera nacional y entregarla a las generaciones futuras".

Enfatizó que "el pueblo tunecino sabe lo que quiere, y queremos respetar la voluntad de la gente".

Asimismo, subrayó la necesidad de discutir ideas, y no programas para construir la próxima fase".

LE RECOMENDAMOS LEER

Elecciones en Túnez: A segunda vuelta dos candidatos ajenos a partidos tradicionales