Irán saluda plan del cese al fuego de Ansar Allah en Yemen
Irán da bienvenida al plan del movimiento yemenita Ansar Allah para establecer un alto el fuego y terminar con los ataques de Arabia Saudita y sus aliados.
La Cancillería iraní saludó la propuesta del Gobierno de Salvación Nacional de Yemen para detener el lanzamiento de misiles y aviones no tripulados (drones) a Arabia Saudita, país que también debe poner fin a sus bombardeos y agresiones contra el país más pobre del mundo árabe.
De acuerdo con Sayyed Abbas Mousavi, vocero de la Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, la República Islámica saluda la iniciativa del Gobierno de Salvación Nacional de Yemen y la evalúa como un plan para el establecimiento de estabilidad y seguridad en la región.
Lamentablemente, agregó, pese a la bienvenida internacional a este plan, Arabia Saudita continúa bombardeando varias zonas de Yemen, país que desde marzo de 2015 es escenario de una campaña militar brutal del régimen saudita y sus aliados.
Conforme al diplomático iraní, Teherán alienta al Gobierno saudita a aceptar esta propuesta y apoyar cualquier medida para poner fin a la guerra opresiva contra la nación yemenita, y la considera como paso importante hacia la paz y la estabilidad en la región.
El 20 de septiembre, el presidente del Consejo Político Supremo de Yemen, Mahdi al-Mashat, anunció, por su parte, que Ansar Allah dejaría de atacar a los sauditas con misiles y aviones no tripulados (drones), si la parte saudita detuviese sus acometidas.
El anuncio de las fuerzas yemenitas se produce una semana después que lanzaran certeros ataques con drones contra instalaciones vitales de la compañía petrolera saudita Aramco, provocando una gran destrucción que ha derivado en la interrupción de la producción de 5,7 millones de barriles de petróleo, que equivalen a un 6 % de la producción mundial.
De hecho, los constantes ataques de represalia yemenitas, efectuados con drones y misiles de fabricación propia han puesto en jaque al régimen de los Al Saud, que destina millones de dólares a la compra de armas y equipos militares a países occidentales como Estados Unidos, el Reino Unido y Francia.