Clérigo iraquí rechaza injerencia de EE.UU. en asuntos internos del país
En reunión con el embajador estadounidense en Bagdad, Matthew Tueller, Al-Hakim aseguró que monitorea los pasos reformistas tomados por el Gobierno de Bagdad que persiguen satisfacer las demandas populares.

El clérigo iraquí, Sayyed Amar al-Hakim, expresó a Estados Unidos que la crisis en su país será resuelta por el propio pueblo no a través de injerencias externas.
En reunión con el embajador estadounidense en Bagdad, Matthew Tueller, Al-Hakim aseguró que monitorea los pasos reformistas tomados por el Gobierno de Bagdad que persiguen satisfacer las demandas populares.
Asimismo, hizo referencia a los actos de violencia cometidos durante las recientes protestas en el país e hizo hincapié en la necesidad de “responsabilizar a los autores de la pérdida de vidas”.
Últimamente, el Gobierno iraquí se está esforzando por responder a las demandas de los manifestantes que desde el 1 de octubre comenzaron las protestas contra la corrupción y el empeoramiento de las condiciones sociales en el país árabe.
Entre otras medidas, Bagdad planteó varios paquetes de reformas estructurales y electorales, mientras las Fuerzas Armadas del país árabe se encargan de garantizar la seguridad de las protestas, prometiendo hacer frente a los alborotadores y agentes infiltrados entre los manifestantes que han tratado de crear caos en el país.
Varios analistas y responsables iraquíes consideran que EEUU, junto al régimen israelí son los actores extranjeros que están promoviendo la violencia en las protestas pacíficas en el país árabe para crear el caos y poder mantener el control económico y político de un Irak destrozado y finalmente hacerse con el control del petróleo.
Dentro del marco de su postura injerencista, Washington ha hecho un llamado a elecciones anticipadas en Irak. Bagdad, no obstante, le ha asegurado al país norteamericano que las reformas en el país árabe no serán “dictadas por el exterior”.