Escala tensión entre México y Bolivia por asedio a embajada en La Paz
Numerosos países de América Latina se solidarizan con México y rechazan la medida de fuerza del régimen golpista de Jeanine Áñez, indican hoy casi todos los medios de prensa de ese país.
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Escala tensión entre México y Bolivia por asedio a embajada en La Paz
La situación entre México y Bolivia sigue tensa por el asedio a la embajada en La Paz donde hay aún asilados del gobierno del expresidente Evo Morales.
Numerosos países de América Latina se solidarizan con México y rechazan la medida de fuerza del régimen golpista de Jeanine Áñez, indican hoy casi todos los medios de prensa de ese país.
El lunes el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, denunció la violación de los preceptos de la Convención de Viena y otros del derecho internacional por parte de los golpistas.
En una versión muy amplia de lo que ocurre en La Paz, el diario Milenio recuerda que el gobierno de México expresó su preocupación por la presencia excesiva de personal de losservicios de inteligencia y de seguridad bolivianos que vigilan tanto la residencia como la embajada de México en Bolivia, intimidando al personal que labora en esos lugares.
Agrega que el reclamo llegó hasta la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para hacerles saber, a través de un escrito, que desde el pasado sábado 21 alrededor de 150 elementos policiales y de inteligencia del Ministerio del Interior de Bolivia rodean la residencia.
Luego de que la cancillería mexicana expresara su preocupación, el expresidente Morales condenó la presencia de policías y la vigilancia con drones, acciones que calificó "propias de la dictadura militar".
Según las versiones de prensa, aproximadamente 20 políticos se encuentran en la embajada de México en Bolivia; el gobierno de ese país emitió órdenes de aprehensión contra cinco de ellos, frenando su traslado.
El gobierno de facto acusó a México de violar supuestamente las reglas internas de la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (Celac) al convocar reuniones de ese órgano en enero sin consultar a La Paz, que ocupa la presidencia rotativa, y por lo tanto no descarta abandonar el bloque.
Las autoridades mexicanas no reconocen al régimen golpista y mantienen sus relaciones con el presidente constitucional de Evo Morales a quien concedió asilo político. El exmandatario boliviano se trasladó hacia Argentina bajo el estatuto de refugiado.