EE.UU. retira parte de sus soldados del Medio Oriente
Unos mil soldados estadounidenses han abandonado Kuwait después que fueron desplegados a raíz del asesinato de Qasem Suleimani, y que se retiren otros 2 mil en las próximas semanas, según funcionarios militares.
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EE.UU. retira parte de sus soldados del Medio Oriente.
El ejército de Estados Unidos ha comenzado a retirar un pequeño número de tropas de Medio Oriente tras concluir que la amenaza de ataques de represalia por parte de Irán o de sus representantes ha disminuido, dijeron los oficiales militares, según un reporte de Wall Street Journal.
Unos mil soldados de combate que se habían desplegado en Kuwait días después del ataque del 3 de enero que asesinó al general Qassem Suleimani, han abandonado la región en las últimas dos semanas, dijeron los oficiales.
Se espera que otros 2 mil miembros de la misma brigada abandonen la región en las próximas semanas.
De acuerdo con la publicación, se trata de las primeras salidas de las fuerzas terrestres desde el aumento de las hostilidades en enero, lo que indica una tenue confianza por parte de los funcionarios estadounidenses en que la tensión inmediata en la región ha comenzado a disminuir.
En los dos meses transcurridos desde la muerte del general Suleimani y los ataques iraníes de represalia, sostiene The Wall Street Journal, el brote de violencia que muchos funcionarios estadounidenses temían no se ha materializado. Los funcionarios dijeron que ahora están más seguros de que la ventana para la posible violencia relacionada con su muerte ha pasado, dijeron.
Además, Irán se enfrenta a una amenaza más inmediata: uno de los brotes más mortíferos del nuevo coronavirus fuera de China. Hasta el lunes, al menos 194 iraníes, incluidos dos miembros del Parlamento, habían muerto y se había informado que casi 7 mil personas habían contraído el virus.
Según algunos oficiales del Pentágono, el coronavirus ha afectado la capacidad de Irán para responder al ataque de enero. "Su enfoque es interno", dijo un funcionario.
Algunos críticos advirtieron que podría ser demasiado pronto para concluir que Irán y sus representantes no responderán más.
