Las Fuerzas de Movilización Popular de Iraq forman parte de los logros del Eje de la Resistencia en la región. Ellas lucharon en el territorio en defensa de la seguridad nacional, regional y la paz mundial, afirmó Ahmed al-Sharifi, experto en asuntos de seguridad y estrategia. 

En entrevista con Al Mayadeen, Al-Sharifi señaló que la fatua de la Autoridad Religiosa lanzó un proyecto de movilización nacional y proporcionó apoyo al frente contra el grupo terrorista Daesh.

Indicó que Estados Unidos no pudo penetrar en la región de Jurf Al-Sakhr durante su ocupación de Iraq.

Al-Sharifi confirmó que las Fuerzas de Movilización Popular se han convertido en una parte estratégica del sistema de disuasión iraquí y de la región.

"Quien buscaba desgarrar a la comunidad iraquí se dio cuenta de que las fuerzas populares cruzaron las fronteras sectarias y étnicas. Ellas forman parte de un sistema integrado que se extiende entre el Nilo y el Éufrates para combatir el terrorismo”, declaró.

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Por su parte, Abdul-Sattar Qasim, profesor de Filosofía Política, dijo que "Tel Aviv y quienes están con ella incitaron la guerra contra las Fuerzas de Movilización Popular desde el primer día de su establecimiento".

Según explicó, la preocupación israelí estaba clara por la integración de las fuerzas populares al Eje de la Resistencia.

En su diálogo con Al Mayadeen, el profesor señaló que Tel Aviv trabajó para atacar las bases de las Fuerzas de Movilización Popular en Iraq.

En este sentido, dijo: “(Israel) está aprensivo y vive en apuros debido a las amenazas existenciales que lo rodean".

Al final de sus declaraciones preguntó: "¿Cómo sería la amenaza para Tel Aviv si las fuerzas populares iraquíes se unieran a la resistencia en El Líbano y Palestina?".