Bolton apoyó ciento por ciento la liquidación del general Suleimani
John Bolton, exasesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, apoyó ciento por ciento la decisión de liquidar al comandante de las fuerzas de Al Quds iraní, Qassem Suleimani, según sus declaraciones a a Fox News Channel.
John Bolton, exasesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, apoyó ciento por ciento la decisión de liquidar al comandante de las fuerzas de Al Quds iraní, Qassem Suleimani.
Así trascendió en la entrevista que concediera el propio Bolton a Fox News Channel.
Al referirse al hecho, Bolton expresó: “Lo apoyé al ciento por ciento. Sé mucho sobre lo que precedió a la eliminación de Suleimani, pero no voy a hablar de eso. Tal vez en 15 o 20 años voy a escribir otro libro y compartir algo sobre este tema”.
Según el exasesor de Seguridad Nacional, esa operación pertenece a la categoría de información secreta que no está sujeta a divulgación en la actualidad.
De acuerdo con NBC, actuales y antiguos funcionarios de la Casa Blanca informaron en enero que la administración estadounidense comenzó a discutir la posibilidad de liquidación del equipo Al-Quds desde finales de junio de 2019, cuando las autoridades iraníes derribaron el avión no tripulado militar RQ-4.
Según las fuentes, Bolton convenció a Trump de que Estados Unidos debería responder a las acciones de Teherán con la operación para destruir a Suleimani.
En este asunto fue apoyado por el Secretario de Estado, Michael Pompeo. Sin embargo, como señaló la compañía de televisión, Trump abandonó esta idea y dijo que tomaría ese paso solo si Irán mata a los ciudadanos estadounidenses.
La situación en el Medio Oriente empeoró bruscamente el 29 de diciembre del año pasado, después de varios ataques de la Fuerza Aérea de EE.UU. contra sitios de las brigadas de Hizbullah en Siria e Iraq.
El Pentágono dijo entonces que esa estructura fue responsable del bombardeo de la base iraquí cerca de Kirkuk dos días antes, donde un empleado civil estadounidense murió.
El 3 de enero, el Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció la liquidación de Suleimani en las cercanías del aeropuerto de Bagdad.
Según el Pentágono, el golpe fue de naturaleza defensiva, ya que tenía como objetivo proteger a las tropas estadounidenses estacionadas en Iraq y otros países.
Estados Unidos culpó a Suleimani por supuestamente aprobar una manifestación frente a la embajada de Estados Unidos en Bagdad.
En respuesta, en la noche del 8 de enero, Teherán lanzó un ataque con misiles contra dos objetos en Iraq que el ejército estadounidense utilizó: la base de Ain al-Assad y el aeropuerto de Erbil.