Irán presenta tres nuevos equipos militares de fabricación nacional
El Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán presenta tres nuevos equipos militares fabricados en el país, como parte de los esfuerzos para mejorar el poder defensivo. Ellos son: el lanzacohetes denominado ‘Qarea’, el lanzador antiblindados ‘Nafez-2’ y el fusil de francotirador de alta precisión ‘Ashtar’.
El Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán presenta tres nuevos equipos militares fabricados en el país, como parte de los esfuerzos para mejorar el poder defensivo.
Uno de los productos presentados recientemente es el lanzacohetes denominado ‘Qarea’, un arma desechable de material compuesto para atacar fortificaciones, explicó este domingo el director de la Organización de Investigaciones y la Jihad de Autosuficiencia de la Fuerza Terrestre del CGRI, el general Ali Kuhestani.
El cañón de cohetes, dijo en entrevista concedida a la agencia iraní de noticias Tasnim, pesa 8 kilogramos y cuenta con una tecnología de lanzamiento suave, el cual es el método de lanzamiento de un misil de tal manera que el motor del cohete se enciende fuera del tubo de lanzamiento; el misil es expulsado no de manera explosiva.
Otro producto dado a conocer por el CGRI es el lanzador antiblindados denominado ‘Nafez-2’ (Penetrador). El arma portátil, de material compuesto, explicó el general Kuhestani, pesa 19 kilogramos. Puede usar municiones antiblindados y antifortificaciones.
Asimismo, otro importante logro presentado por el CGRI es un fusil de francotirador de alta precisión, denominado ‘Ashtar’. El rifle tiene un calibre de 7,62 × 64 milímetros. Su alcance efectivo es de 800 a mil metros y tiene un alcance de zoom de 24X, agregó.
El arma se produce en una versión de calibre 80 mm y su alcance efectivo es de 250 a 300 metros.
Estos logros en la industria militar se han alcanzado a pesar de que el país ha sufrido en las últimas cuatro décadas sanciones unilaterales y severas de manos de EE.UU.
Sin embargo, la República Islámica ha conseguido ser autosuficiente en la fabricación de una amplia variedad de sistemas y equipos militares avanzados, en función de sus propias capacidades tecnológicas.
No obstante, las autoridades iraníes han declarado una y otra vez que la capacidad militar iraní no representa amenaza alguna para otros países y que su doctrina de defensa se basa simplemente en la disuasión.
Por su parte, el general de división Hossein Salami, comandante en jefe del CGRI, al comentar sobre el embargo de armas global de una década contra Irán, que expirará en octubre, sugirió que las restricciones en realidad proporcionaron "una oportunidad para que nuestros científicos satisfagan las necesidades de defensa utilizando nuestra capacidad interna".
"Hoy, no dependemos de los extranjeros para ninguno de los sistemas de armas … Hemos alcanzado la etapa de autosuficiencia e independencia", explicó Salami.
A pesar del embargo de armas y de gastar sustancialmente menos que Estados Unidos y sus adversarios regionales en defensa, Irán ha logrado crear una gran cantidad de sistemas avanzados de armas convencionales, incluidos misiles, drones y sofisticados sistemas de defensa aérea.
En junio pasado, el sistema de defensa aérea Khordad-3 desarrollado a nivel nacional derribó un avión no tripulado estadounidense de 220 millones de dólares que voló al espacio aéreo iraní en el Estrecho de Ormuz.
La semana pasada, la administración Trump avanzó con un proyecto de resolución para tratar de extender el embargo de armas de las Naciones Unidas contra Irán, acusando a Teherán de suministrar armas a los rebeldes hutíes en Yemen y de participar en una serie de otras actividades ilegales en todo el Medio Oriente.
Irán rechazó las afirmaciones, mientras que los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, Rusia y China, indicaron que, basándose en los compromisos de Irán de no buscar armas nucleares, Estados Unidos no tiene motivos para exigir una extensión del embargo de armas.