Sugieren a Biden reconstruir relaciones con Irán
La política exterior de Donald Trump consiguió puntos altos con la formalización de relaciones entre "Israel", aunque la errática beligerancia del mandatario ha sido francamente aterradora, expresa un comentario de The American Conservative.
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Sugieren a Biden reconstruir relaciones con Irán
Y a pesar de sus diatribas contra Venezuela, Corea del Norte y Siria, la nación que recibió la mayoría de los impulsos agresivos de Trump ha sido Irán.
Durante la campaña de 2016 por la presidencia, arremetió contra el acuerdo nuclear logrado por el gobierno de Barack Obama con Teherán y prometió romperlo y sustituirlo por uno mejor.
Según el original, Irán congeló su programa nuclear a cambio del levantamiento de sanciones económicas internacionales.
El saliente jefe de la Casa Blanca sacó a Estados Unidos de ese pacto y volvió a imponer sanciones severas, aunque no logró que más concesiones ni que se firmará otro tratado.
Las relaciones bilaterales se deterioraron aún más con el asesinato del general iraní Qasem Soleimani y en días recientes se cree que contribuyó a eliminar al científico Mohsen Fakhrizadeh.
Irán responsabilizó a (Israel) por ese asesinato, mientras Tel Aviv se niega a comentar.
El ataque al científico tiene las marcas de uno de los muchos asesinatos selectivos israelíes en el Medio Oriente.
Si "Israel" realmente mató al científico, entonces la pregunta es: ¿el Trump pro-"Israel" dio luz verde al golpe? Y si no lo hizo, ¿estaba (Israel) tratando de hacerlo antes de que entrara el gobierno entrante de Joe Biden?
Después de todo, Biden ha dicho que le gustaría volver a unirse al acuerdo nuclear multilateral de Irán.
Trump e (Israel) tratan de contaminar tanto las relaciones entre Estados Unidos e Irán para que tal deseo sea más difícil o incluso imposible, asegura theamericanconservative.
Sin embargo, el presidente entrante debería superar ese tumulto y unirse al trato.
Tener aguantado el programa nuclear de Irán es mejor que un arsenal cada vez mayor como Irán ha acumulado lentamente, incluso se podría decir a regañadientes, desde que Trump renegó del pacto.
Irán solo se saltó algunas limitaciones del tratado multilateral, tras dar un año al resto de los signatarios, en específico la tríada europea de Alemania, Francia y Reino Unido, para que lo ayudarán a sortear las renovadas sanciones de Estados Unidos.
Pero ante el temor de ser condenados o castigados por Estados Unidos, evitaron apegarse a lo suscrito en el convenio nuclear de aliviar los efectos de las renovadas medidas antiiraníes.
La racionalidad de la virulenta oposición del gobierno de línea dura del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu contra el acuerdo nuclear nunca estuvo clara, tal vez a la espera de un ataque norteamericano contra instalaciones nucleares iraníes.
Después de todo, el acuerdo congeló el programa nuclear de su principal rival, a diferencia de la situación actual en la que Irán está acumulando más material nuclear.
Antes que Trump abandone el escenario en unos dos meses, solo para enrarecer al entrante Biden podría estar dispuesto a continuar la salva inicial contra la República islámica con ataques o dar a (Israel) el guiño y el empujón para hacerlo.
Esas opciones de política son realmente una mala idea.
Después que Trump se retiró del acuerdo nuclear, Irán mostró signos de querer salvarlo con los otros signatarios.
Además, cuando Trump asesinó a Soleimani, Irán fue muy mesurado en su represalia contra las fuerzas estadounidenses.
Irán quiere reparar su economía para evitar el malestar social, que es una amenaza para su gobierno y a fin de lograrlo necesita alivio de sanciones.
Por lo tanto, Biden debería trabajar para volver a unirse al acuerdo nuclear y reconstruir las relaciones con esa nación, sin importar lo que (Israel) o Trump puedan hacer entre ahora y el Día de la Inauguración.