África merece la solidaridad mundial
Esa región del planeta demanda 'siglos de atención' y la cooperación de todos los países.
-
África merece la solidaridad mundial
África merece la solidaridad internacional y mucho más que un día, pues el mundo está en deuda con ese continente, afirmó el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, en su cuenta de Twitter.
A propósito de celebrarse hoy el Día de África, el mandatario destacó que esa región del planeta demanda 'siglos de atención' y la cooperación de todos los países.
'El mundo se enriqueció empobreciéndola', refirió el jefe de Estado en la red social y envió un abrazo 'al continente con el que compartimos ancestros y batallas por la independencia y la vida'.
Díaz-Canel felicitó a la Unión Africana y reiteró la solidaridad de su país con los pueblos de esa región, 'con quienes luchas y retos comunes forjaron lazos inquebrantables'.
'Cuba celebra el Día de África, un continente al que nos unen historia, tradición y cultura', añadió.
También el ministro de Relaciones Exteriores de la Isla, Bruno Rodríguez, destacó las raíces culturales y los vínculos históricos comunes, así como ratificó la solidaridad con esos pueblos.
La víspera el presidente del Parlamento cubano, Esteban Lazo, resaltó los nexos históricos y agradeció el apoyo africano contra el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos.
En mensaje de saludo y felicitación al Parlamento Panafricano con motivo del Día de África, Lazo ratificó también la disposición de aumentar los vínculos bilaterales.
En su misiva recordó la historia común, desde la etapa de la esclavitud y la guerra por la independencia cubana, así como la participación de más de 300 mil combatientes internacionalistas y colaboradores civiles de esta tierra en la lucha contra el colonialismo, la dominación, el racismo y el apartheid en África.
Cada 25 de mayo se celebra el Día de África, fecha que conmemora la creación de la Organización para la Unidad Africana en 1963, la cual se convertiría en 2002 en la Unión Africana (UA).
Entrada la noche de aquel 25 de mayo, hace hoy 30 años, el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, daba la bienvenida al país al último contingente de combatientes que regresaba victorioso de Angola.
Al pie de la escalerilla del avión, el general de brigada Samuel Rodiles, jefe de la misión militar cubana en el país africano, daba el reporte sobre el completo retorno de todas las fuerzas, cinco semanas antes de la fecha acordada en la Declaración Conjunta con el Gobierno angolano (1 de julio de 1991).
Ver esta publicación en Instagram
Culminaba así la ayuda brindada por la nación caribeña ante las amenazas a la independencia de ese pueblo, y por la cual durante más de 15 años alrededor de 300 mil cubanos viajaron miles de kilómetros para luchar junto a los angolanos, en la llamada Operación Carlota.
El 4 de noviembre de 1975 había comenzado el traslado de tropas desde la Isla, en respuesta a la solicitud del Gobierno del Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA), con Agostino Neto al frente.
Cuba cumplía de esa manera con 'un elemental deber internacionalista', explicó Fidel Castro el 22 de diciembre de 1975, durante la clausura del primer congreso del Partido Comunista del país caribeño.
'Simplemente aplicamos una política de principios. No nos cruzamos de brazos cuando vemos a un pueblo africano, hermano nuestro, que de repente quiere ser devorado por los imperialistas y es brutalmente atacado por África del Sur', dijo en esa ocasión.
La decisiva participación antillana junto a las inexpertas Fuerzas Armadas para la Liberación de Angola (Fapla), permitió inclinar la balanza y derrotar a la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (Unita) y al ejército sudafricano.
Los triunfos militares de Cuito Cuanavale, Quifangondo, Cabinda, Ebo y la heroicidad mostrada en Sumbe y Cangamba labraron el camino, junto a las acciones diplomáticas, para que el 22 de diciembre de 1988 Cuba, Angola y Sudáfrica firmaran un acuerdo que cambió la historia del llamado continente negro.
El convenio no solo establecía la seguridad de Angola y la paz entre los países del suroeste africano, sino que garantizaba la independencia de Namibia.
El líder sudafricano Nelson Mandela le atribuiría otra significación a este triunfo: la de convertirse en el punto de giro definitivo para completar la liberación del continente, incluida la derrota al régimen del apartheid.
'El pueblo cubano ocupa un lugar especial en el corazón de los pueblos de África. Los internacionalistas cubanos hicieron una contribución a la independencia, la libertad y la justicia en África que no tiene paralelo por los principios y el desinterés que la caracterizan', expresó Mandela en su visita a la nación caribeña en 1991.
Cuba había prometido que de Angola solo se llevaría la entrañable amistad, el agradecimiento del pueblo y los restos mortales de sus 'queridos hermanos caídos en el cumplimiento del deber', como afirmara en diciembre de 1976 el General de Ejército Raúl Castro, entonces ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
Y así fue. Los cuerpos de dos mil 85 combatientes que ofrendaron su vida en esa lucha, junto a otros 204 que murieron mientras realizaban tareas civiles, fue lo único que trajeron desde tierras africanas las tropas caribeñas.
No aspiraban los cubanos a nada material, como sostuviera Fidel Castro en 1975: 'Algunos imperialistas se preguntan por qué ayudamos a los angoleños, qué intereses tenemos nosotros allí. (…) No! Nosotros no perseguimos ningún interés (…)'.
Tres décadas después, la amistad y la libertad emergen como los verdaderos triunfos de aquella epopeya.
'Esas misiones cumplidas conjuntamente en el mismo puesto de combate –señaló el general Samuel Rodiles–, donde junto han muerto uno al lado del otro, angolanos y cubanos, ese lazo de amistad jamás podrá despedirse'.
El subdirector general de la Prioridad África de la Unesco, Firmin Edouard Matoko, destacó hoy el compromiso de Cuba en acciones de colaboración y hermandad con los pueblos africanos durante más de cinco décadas.
Al celebrarse este martes el Día de África, el alto funcionario de las Naciones Unidas ponderó asimismo los profundos lazos de amistad y solidaridad que unen a la nación caribeña con África, continente que, dijo, 'se encuentra profundamente enraizado en la identidad cubana'.
El subdirector de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) resaltó que cuando hoy el mundo demanda mayor cooperación y multilateralismo, 'queremos recordar' aquellas brigadas médicas cubanas que desempeñaron un rol decisivo en la salud pública de todo el continente africano.
'Hoy nuevamente Cuba acepta el reto, se hace presente y vuelve extender una mano hermana a África', subrayó en referencia a las 57 brigadas médicas del contingente Henry Reeve que brindaron su cooperación en 40 países del mundo.
Matoko elogió el amplio programa cultural de la nación caribeña con motivo del Día de África, en el cual se aprecia los profundos vínculos históricos y culturales que unen a Cuba y a ese continente, y las variadas expresiones del hermoso patrimonio que comparten, remarcó.
El funcionario de la Unesco manifestó que África es una prioridad para ese organismo, desde donde se trabaja en el acompañamiento de ese continente a favor de la paz y el desarrollo sostenible.
Lamentó que este año las celebraciones por el Día de África quedarán pospuestas por la 'increíble crisis' provocada por la pandemia de la Covid-19.
Sin embargo, estimó, es una oportunidad para reconocer que la cultura africana y de los afrodescendientes brinda a la humanidad la oportunidad de celebrar su origen común y destacar la función de la Cultura como palanca para el desarrollo de los países.