Ocupación estadounidense envía más de 50 camiones a la zona siria de Hasakeh
Fuentes locales, que hablaron bajo condición de anonimato, dijeron a la agencia oficial de noticias siria SANA que un convoy de 55 camiones, entre ellos petroleros y remolques, cruzó el jueves el paso fronterizo de Waleed y se dirigió hacia las posiciones estadounidenses en la provincia.
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Ocupación estadounidense envía más de 50 camiones a la zona siria de Hasakeh.
En medio de los intentos de Washington por seguir saqueando las reservas de petróleo y los recursos naturales en Siria, el ejército de Estados Unidos ha enviado camiones cargados de municiones y equipos logísticos a la provincia nororiental del país árabe de Hasakeh.
Fuentes locales, que hablaron bajo condición de anonimato, dijeron a la agencia oficial de noticias siria SANA que un convoy de 55 camiones, entre ellos petroleros y remolques, cruzó el jueves el paso fronterizo de Waleed y se dirigió hacia las posiciones estadounidenses en la provincia.
Este hecho se produce sólo unos días después que 33 vehículos militares estadounidenses, que transportaban municiones y equipo logístico, atravesaran el mismo paso fronterizo desde la región semiautónoma del Kurdistán, en el norte de Iraq, y entraran en territorio sirio.
El ejército estadounidense ha estacionado fuerzas y equipos en el noreste de Siria, y el Pentágono afirma que el despliegue tiene como objetivo evitar que los yacimientos petrolíferos de la zona caigan en manos de los terroristas del Daesh.
Sin embargo, Damasco desmiente y dice que el avance tiene como objetivo saquear los recursos del país.
El expresidente Donald Trump admitió en más de una ocasión que las fuerzas estadounidenses estaban en Siria por su petróleo.
Tras fracasar en su intento de derrocar al gobierno sirio a través de apoderados y de su participación directa en el conflicto, el gobierno estadounidense ha intensificado su guerra económica contra el país árabe.
El pasado mes de junio, Estados Unidos promulgó la llamada Ley César, que impuso las sanciones más duras jamás impuestas a Siria con el supuesto objetivo de ahogar los ingresos del gobierno.
Sin embargo, las sanciones han paralizado la economía del país devastado por la guerra al prohibir a las empresas extranjeras comerciar con Damasco.
Siria afirma que el verdadero objetivo de estas medidas es presionar a los sirios y sus medios de vida, un intento inhumano de asfixiar a la gente corriente.
