El representante especial de Estados Unidos para Afganistán, Zalmay Khalilzad, presentó su dimisión tras la humillante derrota del ejército estadounidense en la guerra de 20 años en el país y el fracaso del llamado proceso de paz, según confirmó el Departamento de Estado.

La dimisión fue presentada el lunes en una carta enviada al Secretario de Estado Antony Blinken y se hizo efectiva este martes.

Khalilzad dijo a Blinken que era "el momento adecuado" para dejarlo, "en una coyuntura en la que estamos entrando en una nueva fase de nuestra política en Afganistán".

"Mañana dejo mi cargo de Representante Especial para la Reconciliación en Afganistán. He decidido que ahora es el momento adecuado para hacerlo, en una coyuntura en la que estamos entrando en una nueva fase de nuestra política en Afganistán", escribió en la carta, obtenida por Politico.

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Khalilzad admite que "el acuerdo político entre el gobierno afgano y los talibán no avanzó como estaba previsto. Las razones para ello son muy complejas y compartiré mis reflexiones en los próximos días y semanas".

"De cara al futuro, pienso contribuir a la discusión y al debate no sólo sobre lo que ha ocurrido, sino sobre lo que debe hacerse a continuación", continuó.

Khalilzad trabajó tanto con el ex presidente republicano Donald Trump como con el actual presidente demócrata Joe Biden como representante especial para la reconciliación en Afganistán.

Dirigió varias rondas de conversaciones con los talibán en Qatar que desembocaron en el acuerdo de la administración Trump de abandonar Afganistán en mayo de 2021. Biden retiró las tropas estadounidenses del país el 31 de agosto.

"Agradezco al embajador Khalilzad su servicio y doy la bienvenida al Representante Especial West a su función", dijo Blinken en un comunicado.