Rasmy Hassouna, ingeniero civil tejano y contratista de la ciudad de Houston, está luchando contra la ocupación israelí a su manera y decidió tomar cartas en el asunto y presentar una demanda contra la ley del estado de Texas que prohíbe a los contratistas del gobierno boicotear la ocupación israelí, lo que ocurre en más de 25 estados de Estados Unidos, informó The Guardian.

Este ciudadano palestino-estadounidense estaba a punto de renovar su contrato con el gobierno antes de darse cuenta de una cláusula legal que le prohíbe a él y a su empresa A&R Engineering and Testing, Inc, protestar jamás contra "Israel" y sus productos mientras trabaje para Houston, informó el medio.

"Vine aquí y pensé que era un hombre libre. No es asunto de nadie lo que hago o lo que digo, mientras no perjudique a nadie", expresó Hassouna.

"¿Por qué tengo que jurar lealtad a un país extranjero?", cuestionó.

Según The Guardian, la empresa de Hassouna es una de las dos únicas que han desafiado dichas leyes.

La demanda se verá en un tribunal federal el martes por violar la libertad de expresión, y si se falla, se cancelará la prohibición de boicot a "Israel" de 2019 en Texas.

Sin embargo, según su abogado, el caso de Hassouna podría costarle perder cierta cantidad de dinero de sus ingresos anuales.

Llegó a Estados Unidos como inmigrante en 1988 y se convirtió en ciudadano estadounidense en 2005. Por aquel entonces, libró su primera batalla: en su certificado de ciudadanía ponía "Israel" en el apartado de lugar de nacimiento.

"Fui a la señora que entregaba los certificados y le dije que no quería a 'Israel' en mi certificado", explicó.

"Me dijeron que 'Palestina no estaba en el sistema", dijo.

Tras discusiones de ida y vuelta con los funcionarios, la oficina de inmigración le concedió finalmente un nuevo certificado en el que la sección de lugar de nacimiento decía Franja de Gaza.